Huelga de socorristas en Ibiza: tumbas en la playa para escenificar que "nos ahogan a nosotros, y a la ciudadanía"

Ibiza

Esta mañana, las playas del Arenal de Sant Antoni han amanecido convertidas en un cementerio simbólico. Decenas de tumbas simuladas en la arena, acompañadas de cruces y mensaje. Dicen los socorristas en un comunicado que lo que quieren reflejar con ello es el hartazgo del colectivo y de toda una ciudadanía porque sienten que se están ahogando bajo las políticas del Govern de Marga Prohens.

Después de casi un mes de huelga indefinida, dicen que siguen recibiendo solo silencio institucional. Añaden que mientras Baleares vuelve a romper récords de turistas y de beneficios para los hoteleros, la vida de los trabajadores y vecinos es cada vez más precaria: el acceso a la vivienda se ha vuelto un lujo, los salarios se estancan y la subsistencia mes a mes es una carrera de fondo.

Los socorristas denuncian también un modelo de socorrismo caduco, impuesto desde 2005, que nada tiene que ver con la seguridad real en las playas. Un modelo no preventivo, que permite una torre cada 800 metros y promueve la figura de un “socorrista reactivo”: un hamaquero o camarero con título, sin obligación de entrar al agua en caso de rescate o de practicar una reanimación. Y hablan directamente de Pablo Gárriz, director general de Emergencias, y Marga Prohens, presidenta del Govern, que denuncian no han dado explicaciones sobre un modelo que exprime a los trabajadores mientras desprotege a la ciudadanía.

Desde la Unió Socorristes de Balears han exigido que se escuche a quienes realmente garantizan la seguridad de los bañistas, y que se ponga fin a este sistema que solo protege los intereses de unos pocos.

⸻