Ibiza y Formentera, declaradas zonas afectadas por el serotipo 3 de lengua azul
Se ha confirmado un caso en una explotación ovina de Santa Eulària

Ovejas / CAIB

Ibiza
El Govern ha declarado Ibiza y Formentera como zonas afectadas por el serotipo 3 de la enfermedad de la lengua azul, tras confirmarse un caso en una explotación ovina de Santa Eulària.
La medida supone la declaración de emergencia sanitaria animal y coincide con el inicio de la segunda campaña de vacunación obligatoria contra el serotipo 8 en las Pitiusas.
Aprovechando esta planificación, la Conselleria de Agricultura y Medio Natural ha anunciado que también se administrarán las dosis del serotipo 3 a todo el ganado de la zona.
Por su parte, el director general de Agricultura y Ganadería, Fernando Fernández, ha explicado que el foco detectado está "muy localizado" y que se han seguido los protocolos marcados por la Unión Europea y el Ministerio.
El caso ya se ha registrado oficialmente en el Sistema de Alerta Sanitaria Veterinaria.
Según Fernández, el plan de vacunación ha permitido frenar la propagación de la enfermedad, concentrando el 82 % de los casos en la mitad occidental de Mallorca. Además, continúa la campaña de vacunación del serotipo 8 en todo el archipiélago, sin que se haya detectado ningún nuevo foco este año.
Prevención de la gripe aviar
Por otro lado, el Consell de Ibiza ha reforzado las medidas de prevención ante el aumento de casos de gripe aviar en España y ha insistido en la importancia de mantener medidas de prevención y bioseguridad ante el incremento de esta enfermedad.
Aunque por el momento no se ha detectado ningún caso en Ibiza, se considera alto el riesgo de introducción del virus, especialmente en zonas húmedas de los municipios de Ibiza, Santa Eulària y Sant Josep.
Como medidas preventivas, se ha recordado a los criadores de aves de la isla de la necesidad de confinar las aves de corral, ha detallado la institución ibicenca.
Por otro lado, está prohibida la cría al aire libre y, en caso de no ser posible mantenerlas cerradas, se deben instalar mallas para evitar el contacto con aves salvajes.
Además, el alimento y el agua deben proporcionarse dentro de las instalaciones o en zonas protegidas.
Los veterinarios han hecho un llamamiento a ganaderos, avicultores y particulares para que mantengan vigilancia activa y notifiquen cualquier sospecha de enfermedad, como muerte repentina, falta de apetito, inflamación del cabeza o alteraciones nerviosas.
También han desaconsejado la manipulación de aves salvajes encontradas muertas o enfermas y ha instado a comunicar cualquier caso a los servicios competentes, de acuerdo con los protocolos establecidos.
El Consell de Ibiza ha remarcado que estas medidas buscan proteger la salud animal y prevenir la propagación del virus en la isla, y solicita la colaboración del sector ganadero y de la ciudadanía para garantizar su eficacia.




