Un migrante irregular recurre catorce veces menos a la Atención Primaria que un español

Palma

Un migrante en situación irregular en España recurre catorce veces menos a la Atención Primaria que un español. Son los datos que aporta Luis Gimeno, médico y profesor de la Universidad de Zaragoza, recogidos de un estudio en el que ha participado él mismo y que desmiente los bulos sobre la sobrecarga del sistema sanitario debido a la población migrante.

Unas cifras que explicará este viernes en una conferencia en la UIB y que señalan que, en concreto, un español acude siete veces al año al médico de cabecera o pediatra, por la única vez cada dos años que lo hace el migrante sin papeles. Es más, hasta en el caso de los extranjeros en situación regular se nota la diferencia, ya que acuden una media de cuatro veces al año. En cuanto al gasto en medicamentos, añade Gimeno, la diferencia es sustancial: 350 euros de media en el caso de los españoles frente a los 10 euros anuales en la población en situación irregular.

Otra de las realidades es que, en consecuencia, los españoles se benefician más de lo que los extranjeros aportan con sus impuestos a la sanidad. Afirmaciones, dice el facultativo, que desmienten las informaciones y comentarios que hablan de turismo sanitario o efecto llamada.

Uno de esos bulos lo promueve continuamente el partido de ultraderecha Vox, que, sin ir más lejos, hace apenas un mes, en el debate de política general en el Parlament, presentaba una medida para limitar la atención sanitaria a migrantes irregulares.

De poco habría servido una hipotética aprobación, considera Gimeno, ya que, en 2012, el Gobierno de Rajoy limitó la atención a extranjeros sin documentación aludiendo recorte de gastos en plena crisis económica. Afectó a un millón de personas que, a día de hoy, y pese a la Ley de Sanidad Universal de 2018, siguen accediendo a una asistencia sanitaria reducida.