Martí: "Lo más importante para jugar con más de 40 años es tener ilusión"

Palma

Iván "el Pichu" Cuéllar será el guardameta titular en el Mallorca, que hoy jugará la segunda ronda de la Copa del Rey ante el CD Numancia en Soria.

Con 41 años y 189 días supera a Pep Lluis Martí como el futbolista bermellón más longevo en vestir la camiseta del Mallorca.

En Ser Deportivos Baleares, el ex capitán ha recordado como en 2015, en un partido entre el Mallorca y el Girona, consiguió ese récord al jugar su último encuentro con 40 años y 33 días. "Lo recuerdo bien porque fue mi último partido como profesional y al cabo de tres meses pasé a mi faceta de entrenador. Me enorgullece poder jugar con esa edad y en el equipo de mi tierra".

A Martí no le ha sorprendido que Cuéllar haya superado ese registro: "A medida que van pasando los años ves que el trato en cuanto a cuidado y exigencia de la competición, permiten que lleguen más. Ahora hay un control más exhaustivo de cargas y de alimentación".

Ambos coincidieron en las temporadas 20-21 en el Leganés y 21-22 en el Sporting de Gijón. Cuéllar era el guardameta y Pep Lluis Martí el entrenador. Por ese motivo, Martí confiesa estar muy contento por el portero y esperará al final del partido para mandarle un mensaje para felicitarle por la victoria o por su actuación.

Respecto al papel que tiene Cuéllar en el Mallorca, donde es el tercer portero, sin disfrutar de muchos minutos de competición, el exjugador del Mallorca explica que cada futbolista "tiene que aceptar su rol dependiendo la edad" y añade: "El jugador debe saber el lugar que le responde y así no llegará a la frustración o la tensión que hace que no rindas de la mejor manera", comenta.

Respecto al secreto para seguir en el fútbol profesional con más de 40 años, como ha hecho él y otros jugadores como Rubén Castro o Joaquín, Martí lo tiene claro: "Lo primero es cuidarse, lo segundo, tener suerte con las lesiones, y la más importante, tener ilusión, la motivación y la alegría de disfrutar de una profesión que es lo más bonito que le puede pasar a alguien. Trabajar de lo que te gusta. Una vez que dejas de jugar, lo que más se parece es entrenar".

Pep Lluis Martí colgó las botas en 2015 y a partir de ahí empezó su etapa de entrenador, que le ha llevado a los banquillos del Tenerife, Deportivo de la Coruña, Girona, Leganés, Sporting de Gijón y UD Ibiza. Para el mallorquín, dirigiendo un equipo se sufre más que de jugador. "Eres el responsable de todo lo que sucede e intentas controlar la situación todo lo posible, además buscas la manera de darle las mejores herramientas a los futbolistas".

Con respecto al partido de esta tarde en Soria, donde se esperan temperaturas de 0 y 1ºC, Pep Lluis Martí considera que ese factor "no debe afectar" y argumenta: "Lo que uno tiene dentro, el carácter competitivo, las ganas de ganar y de demostrar van por encima de cualquier circunstancia. Mientras no haya hielo en la portería del fondo sur, lo demás no tiene que afectar", detalla.

Para el técnico, la clave del encuentro pasará porque el Mallorca no de oportunidades al rival. "No hay que darle opciones de que crean que pueden llevarse el partido. Si lo sometes, poco a poco, los minutos tienen que hacer su desgaste".

También ha hablado de los preparadores físicos que tienen los jugadores para ejercitarse individualmente, más allá del entreno diario del equipo.

"Siempre hay una circunstancia de mejora individual. Tú haces trabajo colectivo, pero a partir de ahí, cada uno tiene una constitución y cada uno necesita un trabajo individualizado. Ese trabajo se hace consensuado con el club. Ese entrenador personal está trabajando en coordinación con el club, porque todos los jugadores tienen su personal de confianza y es la mejora individual, que repercute en el beneficio del equipo", explica el técnico.