Tres tortugas bobas han anidado este año en Baleares, una buena noticia a medias
Diego Ponce habla sobre la proliferación de tortugas en el Mediterráneo por el incremento de la temperatura y los riesgos a los que se enfrentan

Tres tortugas bobas han anidado este año en Baleares, una buena noticia a medias
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Ibiza
En la cita que tenemos todos los miércoles con la biodiversidad y el medio ambiente, el oceanógrafo Diego Ponce nos ha acercado su particular balance del año, con la vista puesta en las tortugas que han anidado este año en Baleares.
Han sido tres, una en Mallorca en julio, otra en Ibiza en el mes de agosto y una más en Menorca, ya en octubre, pero lo que, a priori, se puede interpretar como una buena noticia, tiene una cara negativa, y es que la proliferación de tortugas bobas en el Mediterráneo es un indicador del calentamiento del mar.
Unas tortugas que se enfrentan a riesgos como los residuos plásticos, los pesticidas o la presión del turismo, además de a la propia transformación de los ecosistemas.




