Cuatro playas canarias consideradas "puntos negros" por la llegada masiva de microplásticos

Santa Cruz de Tenerife

Unas 46 playas de la Macaronesia están siendo estudiadas cuatro veces al año, justo dos horas después de la máxima pleamar y gracias a un proyecto europeo denominado IMPLAMAC. En él están participando las universidades de La Laguna, Las Palmas de Gran Canaria y Cabo Verde, además de los gobiernos de Madeira y Azores. El objetivo es analizar la cantidad de microplásticos que llegan a las costas, su composición y su posible procedencia. Aunque los trabajos se iniciaron en junio de 2020, se han vuelto a retomar ahora con el estudio de 18 playas de la provincia tinerfeña: cuatro playas en La Palma (Tazacorte, Puerto Naos, Los Nogales y Los Cancajos), dos en El Hierro (Arenas Blancas y Timijiraque) , cinco en La Gomera (San Sebastián de La Gomera, La Cueva, Playa del Inglés, La Calera y Playa de Vueltas) y siete playas de Tenerife (Almáciga, Playa Jardín, Playa Grande, La Tejita, Diego Hernández y Puertito de Adeje).

Uno de los impulsores y directores del proyecto, el profesor de Química Analítica de la Universidad de La Laguna Javier Hernández Borges, ha reconocido a Radio Club Tenerife de la Cadena SER, que existen "cuatro puntos negros" en Canarias por la llegada masiva de microplásticos. Se da la circunstancia de que ya contaban con tres zonas catalogadas: La Lambra en La Graciosa, Famara en Lanzarote y Playa Grande en Arico, Tenerife. Sin embargo, durante los trabajos del proyecto IMPLAMAC, los investigadores descubrieron un nuevo punto negro, en este caso, en la playa Arenas Blancas de El Hierro.

Hernández confirma que ya cuentan con los primeros resultados en cuanto al tamaño, su composición y procedencia de los plásticos recogidos en las costas del Archipiélago. Se trata de "trozos de plásticos duros, con bordes afilados y de color blanco", lo que indica que llevan mucho tiempo en el océano. Pero además se han observado los llamados "pellets o granzas", es decir, microplásticos primarios que se han fabricado en algún lugar del mundo, se han metido en portacontenedores y recorren grandes distancias hasta países con industrias plásticas.

Aunque el proyecto IMPLAMAC ha venido realizando muestreos estacionales, el profesor de Química Analítica de la ULL, Javier Hernández Borges, confirma que "no parece haber una tendencia estacional. No es que lleguen más microplásticos en una época que en otra". Sin embargo, tras un episodio de tormenta, se ha podido comprobar que las costas reciben gran cantidad de este material sobre todo, en playas como Playa Grande, en la costa tinerfeña de Arico.

Plásticos en la profundidad del mar

IMPLAMAC no es el único proyecto que se está llevando a cabo en las costas de Canarias. Javier Hernández Borges, profesor de Química Analítica de la Universidad de La Laguna, reconoce que se encuentran estudiando y analizando la aparición de microplásticos "en sedimentos marinos a siete metros de profundidad". Para ello han analizado cuatro puntos concretos de las Islas tomando muestras a esas profundidades. Lo cierto es que los microplásticos están apareciendo, explica Hernández, en erizos de mar y pepinos de mar, mientras que ya analizas las aguas residuales y las aguas destinadas a riego.