Invitación a pensar
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COMENTARIO CASTAÑEDA 20 SEPTIEMBRE
Santa Cruz de Tenerife
La naturaleza es un libro abierto que invita a pensar
Afirman los científicos del Involcan que el origen de la erupción de Cumbre Vieja hay que situarlo entre 2008 y 2013.
Ante tal afirmación, me ha dado por pensar ante el cabreo generalizado que impera entre la ciudadanía, que el origen de la calentura de la gente hay que situarlo muchos años atrás, y que con posterioridad, la denominada desafección política se ha ido incrementando ante el lamentable espectáculo individualista que sin descanso han protagonizado sin tregua la casi totalidad de los partidos políticos.
Canarias es un territorio paradójicamente pacífico. La evidente paradoja la escenifica la paciencia de un pueblo ante la degradación diaria a la que es sometida su nivel de vida.
Todos deseamos que persista la coexistencia pacífica, pero comienzan a apreciarse claros síntomas de hartazgo ante los cuales debieran estar muy atentos los que voluntariamente se ofrecieron a solucionar los problemas que afectan a los habitantes de esta tierra.
La irrupción del movimiento popular 15-S que recientemente se echaba a la calle, yo no cometería el error de minusvalorarlo por la cantidad de manifestantes asistentes.
Si estuviera en la piel de los presuntos representantes de la soberanía popular, más que en la cantidad, me detendría a analizar la policromía del desencanto que unió a tantos colectivos.
La gente está cabreada y harta, y se está corriendo el riesgo de que, por la circunstancia que sea, se pueda producir un chispazo social que, más tarde o temprano, podríamos terminar lamentando.
La naturaleza es un libro abierto que invita a pensar, y algunos convivimos con la preocupación de que el magma del desencanto social que habita entre el paisanaje termine erupcionando por alguna parte.
Los encargados de las soluciones no pueden seguir dándole la espalda al enjambre sísmico social.
