La odisea del vuelo VY3278
El avión de la compañía Vueling cubría la ruta Málaga-Tenerife Norte; la mayoría de los pasajeros son obligados a volver al aeropuerto de origen tras aterrizar en Fuerteventura.
Avión de Vueling en despegue
Santa Cruz de Tenerife
La compañía Vueling se negó a pagar manutención, alojamiento y traslados hasta Tenerife una vez el vuelo VY3278 aterrizó en Fuerteventura tras no poder hacerlo en los aeródromos tinerfeños, ni en Gran Canaria y Lanzarote; es la historia que relatan los pasajeros. Las condiciones meteorológicas impidieron el desarrollo normal del vuelo, pero una vez en el recinto majorero, sin poder salir del aparato, el viaje comenzó a torcerse.
"Nos dijeron que iban a tomar nota de las personas que quería quedarse en Fuerteventura o volver a Málaga; nos dicen que si nos bajamos en Fuerteventura los gastos corren de nuestra parte y que no nos trasladaban a Tenerife". Carmen Delgado es maestra en Tenerife y decidió optar por volver a la ciudad andaluza ante las condiciones que imponía Vueling. "No nos dejaron salir en las tres horas que estuvimos en pista; tres horas encerrados", recuerda Carmen. La mayoría de los pasajeros, ante las opciones, decidieron volver a Málaga; la compañía sí les aseguraba cubrir los gastos hasta reembarcar en un nuevo vuelo hasta Tenerife. Tras alrededor de 9 horas volvieron al lugar de partida.
"Una odisea, una pesadilla y una vulneración de derechos y desamparo total". Así de clara se muestra Vanessa Sánchez, otra pasajera. "A su cuenta y riesgo", esa fue la propuesta de Vueling en Fuerteventura. "Yo creo que eso es ilegal", dice Vanessa. Decidió volver a Málaga porque prometieron desayuno, comida, cena y alojamiento hasta que nos reubicaran".
En el aeropuerto andaluz no acabó la odisea. Hasta las 2 de la mañana del lunes no fueron realojados en un hotel. Pero la sorpresa más desagradable se la encontraban horas después, "cuando hoy estábamos desayunando nos dicen que tenemos que dejar el hotel porque la compañía no se ha puesto en contacto con ellos", dice Carmen. Son desalojados de las habitaciones tras "una hora de cortesía del establecimiento", comenta Vanessa. Tras el susto vuelven a las habitaciones con la confirmación de Vueling que deben pasar otra noche, pero muchos pasajeros no tienen vuelo hasta el jueves o el viernes, "se supone que hoy tenemos la noche de hotel pagada, pero mañana a las doce nos vuelven a echar", admite Carmen, "yo tenía que estar en el trabajo este martes y me han dado un vuelo para el jueves".
CARMEN DELGADO
La principal preocupación de los afectados es saber cuándo podrán volar a Tenerife. No entienden que la aerolínea continúe vendiendo pasajes y los reubique tan tarde "teniendo dos conexiones al día entre Málaga y Tenerife Norte". "Ellos siguen vendiendo pasajes a 500 y 600 euros", dice Carmen; "han seguido vendiendo vuelos y me han reubicado el próximo viernes, y tenía que haber llegado ayer domingo", coincide Vanessa.
A la espera de conocer qué pasara finalmente con ellos, la mayoría de los pasajeros están pensando en denunciar a la compañía. "Voy a demandar por daños y perjuicios y los días que he perdido de trabajo. Hay niños, personas mayores y nadie sabe nada. Estamos desesperados", recalca Vanessa. No entienden por qué Vueling no programa otro vuelo.