Tragedia en el Atlántico: 33 personas migrantes mueren ahogadas por el oleaje tras Hermine

Canarias

Las políticas de acogida, las de rescate, las relaciones bilaterales de España con Marruecos... parece que nada sirve para evitar las muertes en el océano Atlántico. Las últimas, las de 29 personas que ya yacen en el océano Atlántico. El buque de Salvamento Marítimo "Miguel de Cervantes" encontró en la embarcación otros cuatro cadáveres y un único superviviente, en estado grave. Una persona que se encuentra en observación en un hospital de Gran Canaria. Una víctima más de las mafias que trafican con seres humanos en el continente africano, pero también de la impunidad con la que normalmente se relatan los rescates, los muertos y los heridos.

Según la portavoz del colectivo Caminando Fronteras, Helena Maleno, "habrían salido hace 9 días desde una zona de El Aaiún". Una de las posibles causas de los fallecimientos, el mal estado del océano en esos primeros días tras 'Hermine', el ciclón tropical por el que se declaró la alerta máxima en el archipiélago a finales de septiembre. Las llamadas "calmas de septiembre" no han sido benévolas este año para las personas migrantes que se acercan al archipiélago en busca de una vida mejor. Muchos suelen irse por discriminación, por guerra en su país de origen. Otros, por ganar dinero para su familia en África. Muchos también quieren hacer vida en los países europeos, donde se encuentran sus familiares.

Esta vez no ha sido posible... se han encontrado con la cara más triste y cruenta de la ruta Canaria. Un océano enfurecido, una embarcación precaria que nada aguanta y desnutrición.

Otra embarcación, esta vez un cayuco ha sido rescatado al sur de la isla de Tenerife, con más de 60 personas a bordo. Y es que esta es la época del año con -normalmente- mayor número de llegadas. Txema Santana, asesor en Vicepresidencia del Gobierno en el área de Migraciones, "todavía quedan 100 personas en el mar intentando llegar a Canarias. No sabemos nada de ellas, y se espera lo peor porque hace días que no hay comunicación".

La ruta canaria es la más mortífera del mundo. Más de 1.000 fallecimientos calcula el Gobierno de Canarias en aguas cercanas a Canarias. En una frontera "desigual", afirma Santana, "y donde constantemente vemos familiares que no saben dónde está su padre, su madre, su hermano o su hija".