Sociedad

Vecinos y ecologistas, en pie de guerra para salvar un humedal en Gran Canaria

César Hernández, de la plataforma Proteger Riquiánez, defiende que "hay que proteger este espacio con más de 40 estanques de gran valor etnográfico y ecológico" y no van a cejar en las acciones para detener definitivamente los vertidos de tierras

Las Palmas de Gran Canaria

Un grupo de vecinos está en pie de guerra desde que conocieran las intenciones de un propietario privado de una finca en la zona de Lomo Riquiánez, en el municipio grancanario de Arucas para tapar un estanque ubicado en un paraje natural afectado por un expediente de protección por su biodiversidad. Ecologistas y vecinos se plantaron en el lugar donde denunciaron la entrada de camiones descargando escombros y afectando a un humedal por el que transitan aves migratorias y especies endémicas como fayal brezal o una palmera canaria que quedó semi sepultada. Las protestas de este colectivo lograron frenar la actividad de los camiones. Según aseguran, estos terrenos están pendientes de la resolución de un expediente del Gobierno de Canarias para que sea declarado como Espacio Natural Protegido para preservar su flora y fauna, además de otros valores etnográficos.

César Hernández, miembro de la plataforma Proteger Riquiánez, es uno de esos vecinos que participó en la paralización de los trabajos de relleno y expresó en la SER que "hacemos mucho hincapié en la protección de los estanques de barro y queremos que se consideren como estructuras de valor etnográfico y ecológico que llevan en el paisaje desde principios del siglo XX y suponen un entorno valioso de flora y fauna". Esta zona de Lomo Riquiánez y Visvique, en Arucas, concentra casi medio centenar de estas infraestructuras que se van deteriorando por diferentes circunstancias, por lo que este colectivo apremia a que las administraciones públicas tomen cartas en el asunto.

Vecinos y ecologistas, en pie de guerra para salvar un humedal