Paulino Rivero: sí al CD Tenerife

Santa Cruz de Tenerife

Paulino Rivero Baute (El Sauzal, 70 años) ha aceptado convertirse en el sucesor de Miguel Concepción al frente del Club Deportivo Tenerife, y así se lo ha confirmado a todos los accionistas de referencia que avalan su nombramiento, según han confirmado a la SER fuentes de la negociación. Faltan por resolver algunas cuestiones relacionadas con las condiciones que ha fijado Rivero, y que deben quedar restañadas este domingo antes del partido contra el Granada CF.

Las conversaciones para que Rivero reemplace a Concepción, quien prevé anunciar su renuncia la próxima semana, las ha pilotado personalmente el presidente del Grupo Número Uno, Amid Achi, gran valedor de su candidatura. Ésta cuenta también con el visto bueno del actual jerarca tinerfeñista, así como del que será nuevo primer accionista del representativo, el inversor peninsular José Miguel Garrido.

Paulino Rivero será un presidente sin honorarios, como así establecen los Estatutos del club tras su última reforma a este respecto. Ha aceptado asumir el cargo sin salario y su investidura se producirá en el transcurso de una Junta General Extraordinaria que será convocada formalmente en noviembre y se celebrará en la primera quincena de diciembre.

El plan pergeñado por los accionistas de referencia en las ultimas horas pasa por el siguiente esquema: una primera comparecencia pública de Miguel Concepción, programada para principios de la próxima semana, en la que hará balance de su gestión y anunciará su decisión de dimitir, con el traspaso de parte de sus acciones a José Miguel Garrido; y a continuación, en el transcurso de las siguientes 48 o 72 horas, la presentación en público del proyecto que encabezará Paulino Rivero. Le acompañarán en su consejo de administración Conrado González Bacallado, Samuel Gómez Abril, Juan Guerrero, Santiago Pozas Arjona y un profesional de reconocido prestigio en su profesión con el que se negocia en estos momentos para que acceda a ser el directivo que cierre el sexteto.

Rivero trazará ante los medios de comunicación un plan de actuaciones para los próximos cinco años. Aunque el principal propósito será recuperar un sitio en la élite del fútbol nacional mediante el ascenso a Primera, que en junio se resistió en el último partido; fijará otros objetivos como un ambicioso plan de cantera, un proceso aperturista del club a los diferentes estamentos de la vida blanquiazul y, lo más relevante, un funcionamiento más moderno y donde todas las responsabilidades no recaigan solo en el presidente. Será un Tenerife distinto y que tendrá como primera gran novedad la elección de un político, retirado de la vida pública, para asumir la presidencia de la institución deportiva más relevante y con repercusión de toda la provincia.

21-N: una fecha clave

El último acto público de Miguel Concepción podría fijarse para el 21 de noviembre, coincidiendo con el 110 aniversario del Sporting Club, entidad en la que encuentra su origen el CD Tenerife. Ese día quiere la directiva que sea la reinauguración de la Ciudad Deportiva Javier Pérez. La ceremonia servirá de despedida al jerarca palmero, que ha permanecido en el cargo por más de 16 años.