Conocer el terreno del Ingreso Mínimo Vital
El comentario de Juan Carlos Castañeda en Hoy Por Hoy La Portada

El comentario de Juan Carlos Castañeda Conocer el terreno del Ingreso Mínimo Vita
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Santa Cruz de Tenerife
La prestación de más servicios y ayudas a los colectivos vulnerables se está tropezando con la pesadez de la maquinaria burocrática. Y eso de hacer más con menos queda muy bien como eslogan voluntarioso-publicitario, pero la realidad, de la que se dice que es tozuda, convierte ese planteamiento en algo irrealizable. Y por esa senda camina el fracaso que ha supuesto que el Ingreso Mínimo Vital no haya llegado, por ejemplo, al 86 por ciento de los potenciales beneficiarios canarios del mismo.
Más información
Con guaguas o con paneles y stands, por mucho que se empeñen los padres de la criatura, resulta imposible que el cacareado flotador concebido para las economías más vulnerables lleva a sus destinatarios. Lo sucedido con el Ingreso Mínimo Vital viene a refrendar el buenismo institucional y el desconocimiento de las dificultades inherentes a este tipo de iniciativas.
Es cierto que en este caso se quiere predicar y repartir trigo, pero una vez más la determinación política se ve frustrada por la carencia de los elementos individuales y por la incapacidad de la administración de dar curso al objetivo perseguido con el añadido de que muchos de quienes podrían ser sus perceptores desconocen tal posibilidad. Dicen que estamos en la era de la plena comunicación, pero el invento ha resultado fallido. Tal vez, si hubiesen preguntado a funcionarios y a los colegios de trabajadores sociales las cosas habrían resultado de manera más exitosa. Cabe concluir, pues, que menos intenciones y más realidades. En consecuencia, antes de anunciar cualquier medida se debe conocer el terreno que se pisa acompañados de los verdaderos entendidos en la materia.




