"Tiene ansiedad y se le cae el pelo": denuncian el abandono del Gobierno de una niña discapacitada

Después de tres años esperando, solo le ha quedado como opción recurrir a difundir en redes sociales un video donde explica su caso: su hija, Teseida que tiene 22 años, lleva ese tiempo pendiente de conseguir una plaza pública donde puedan atenderla. Hasta que cumplió 18 años estaba en un colegio especializado donde mantenía unas rutinas de vida y una actividad física adaptada. Sin embargo, todo ese tiempo lo pasa ahora en su casa atendida por su abuela las horas en las que la madre está en su trabajo. La joven tiene, por ahora, una única actividad al aire libre la práctica del baloncesto con el Proyecto Suma que impulsa Javi Choren con el apoyo del equipo de la ACB del CB Gran Canaria una vez a la semana, además de salidas rutinarias a la compra o de paseo. Aunque intentan mantenerle una actividad doméstica, Ruth sostiene que ya se nota un deterioro en su estado con cuadros de ansiedad, cefaleas o pérdida de pelo. Lamenta que tuviera que exponer su situación en un vídeo porque «no hay plazas, no hay los medios para crearlas y esos niños van a una lista de espera en Gran Canaria». Ella, en diciembre, se dirigió a la consejera de Políticas Sociales del Cabildo Insular de Gran Canaria para pedir que le «dieran información sobre esta vergonzosa lista de espera y el cómputo de personas en esa lista», lamenta Ruth, quien quiere «poner en marcha una plataforma en defensa de nuestros derechos» pero no ha encontrado respuesta. Advierte que la dependencia es más visible, pero en la discapacidad se les silencia porque no hay plazas suficientes. Reclama a quien sea responsable que se ocupen de los derechos de estas personas que al cumplir 21 años se quedan sin protección del sistema público. «Para ellos mi hija es un número pero deben tener en cuenta que es un caso de esa lista y que se pongan a trabajar en lo realmente importante». Asegura que cuando se deja desamparado a un sector como este se pierde la fe y la confianza en las administraciones que no ven el problema de la falta de lugares para poder atenderlos. Según los datos oficiales proporcionados por el propio Cabildo Insular de Gran Canaria, a través del Instituto Social y Sociosanitario, en total hay 96 recursos en la isla para personas con discapacidad, entre centros de atención residencial, residencias, hogares funcionales y viviendas tuteladas. De todas ellas, 43 son centros para personas con discapacidad intelectual con necesidad de tercera persona (NTP) y 35 sin que sea necesario este recurso. Textualmente, en esos centros se atienden a «personas en situación de dependencia por razón de discapacidad intelectual y con limitaciones significativas en el funcionamiento de la conducta adaptativa (prácticas sociales y conceptuales) y necesidad de apoyo para las actividades de a vida diaria, una vez concluido el período educativo». Aseguran que su objetivo es mejorar o mantener el grado de autonomía personal, permaneciendo los usuarios y las usuarias en su entorno y ambiente familiar y también contempla actividades del ámbito ocupacional y sociolaboral.

"Tiene ansiedad y se le cae el pelo": denuncian el abandono del Gobierno de una niña discapacitada

La madre Ruth Santana recurre a difundir en vídeo su caso por la falta de respuesta de la Administración a la espera de una plaza ocupacional tras abandonar el colegio donde estaba escolarizada

Webs de PRISA