Trapaseros, ganadores indiscutibles de la Final de Murgas
En un evento que duró algo más de 5 horas y que retransmitió en directo Radio Club Tenerife
helena sampedro
Santa Cruz de Tenerife
Historia. Es lo que hicieron los componentes de la murga realejera Los Trapaseros, que se coronaron con su primer premio en una Final muy reñida y con gran ilusión tras un periodo largo de pandemia y restricciones. La murga de los años 90 no sorprendió a los allí presentes porque ya habían realizado una muy buena fase.
El nivel se hizo notar también esta vez inaugurando el formato de una canción en la final en este 2023. Aun con problemas de sonido en su interpretación, 'Circo del Sol' hizo las delicias del público, que no esperaba ver una trapecista surgiendo en el escenario junto a los componentes. Un primer premio, como decimos, en un año con alto nivel y voces afinadas. 'Sé que nunca es fácil ser murguero; pero qué facil es ser Trapasero. Una sola voz seremos, si tu corazón y el mío laten Trapasero', cantaban en su pasacalle.
El segundo premio, un mítico de los Carnavales de Santa Cruz de Tenerife: Diablos Locos sorprendieron con sus 'retos': entre ellos, el recuerdo y homenaje a la murga femenina las Triquikonas, que ya no volverán a cantar en las fiestas de la capital tinerfeña, y una tradición diablesca: 'desnudarse en 3 segundos', quedándose sus componentes en ropa interior.
Y quienes destacaron en redes, no solo por su alta popularidad, sino por su buen hacer y su impecable ejecución fueron los Bambones, tercer premio en esta final de Murgas. 'Mi vida es ser un bambón' como leitmotiv y como base para levantar a todo un recinto: 'somos los del no' como nombre del tema que eligieron para el concurso en su última oportunidad. Los del no a un territorio frágil que 'se vende'. El archipiélago y su desarrollo turístico y medioambiental han sido constantes a lo largo de esta edición, y Bambones no se podía quedar atrás. 'Para mí es una familia y sentirlos en el escenario es una sensación muy grande', afirmó ante los micrófonos de Radio Club Tenerife su director Primi.
El accésit, para muchos injusto porque merecía más, para las Burlonas. 'Final a un tema, todo junto y a lo que Dios quiera, que no me falte de nada'. Comprimir en una sola canción el trabajo de tantos meses les ha permitido a las del Barrio de la Salud obtener este premio. Con críticas directas al ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife 'hartas de ver cómo muere la Santa Cruz que amamos', y con un disfraz de loro, el grupo dirigido por Adela Peña hacen también historia con su calidad vocal y su expresión firme sobre el escenario.
El resto de murgas, aunque no premiadas, tampoco defraudó, con el estilo moderno y crítico de los Zeta-Zetas (que sorprendieron con su espectáculo televisivo de números y su 'desbancada' a los políticos del ayuntamiento para, en su lugar, poner a los murgueros); Desbocados, con una clara referencia al caso del niño Hugo, un tinerfeño que saltó al mar y quedó tetrapléjico. La irrupción de su madre en el escenario pidiendo ayuda a las administraciones queda para el recuerdo; Triqui-Traques, con un estilo desenfadado sin variaciones de estilo. Por último, pero no por ello menos importante, los Mamelucos, que demostraron que no hace falta parodiar para presentar un tema sólido. Su polémica a tan solo 24 horas del concurso, con la retirada de Airam Bazzocchi como director del conjunto, no les hizo flaquear y levantaron el ánimo de un recinto que ya venía con ganas de fiesta.
En cuanto a los premios de presentación, también aportados a las murgas todos los años, el primer premio fue precisamente para los Mamelucos, con su disfraz de ave casi imperial que recuerda al mejor Carnaval de Santa Cruz; Bambones con el segundo premio; Diablos Locos y su atuendo pirata, los terceros. Y el accésit para Ni Muchas ni Pocas.
Destacó, mientras el jurado deliberaba, la presencia de Renzzo el Selector amenizando la velada con canciones dignas de un buen Carnaval. Mientras tanto, el equipo de Radio Club Tenerife quiso llevarles a sus casas lo mejor de nuestras fiestas de la mano de José Juan Rolo e Ismael Santana en la técnica y Héctor Palmero, Helena Sampedro y Tatiara Chinea a los mandos 'artísticos' y periodísticos.
