"El incendio nos ha llevado a la quiebra, a la ruina"

Santa Cruz de Tenerife

El incendio que aún no se encuentra controlado en la isla de Tenerife y que ha calcinado, en un perímetro de 90 kilómetros, casi 15.000 hectáreas, hace estragos en la hostelería de los doce municipios afectados de la Isla, sobre todo aquellos que se encuentran en la zona más dañada del monte.

Matilde Hoyos es la gerente del Restaurante Casa Berta, ubicado en la Calle Preventorio, en el monte de La Esperanza, El Rosario. "Esta situación nos ha llevado a la ruina y a la quiebra, no es solamente la decisión de abrir o cerrar, es que la gente se queja de algo que no podemos controlar; la cantidad de humo que hay", señala.

Hoyos recalca que los hosteleros están en una tesitura muy compleja; "cuando nos habíamos levantado un poco del confinamiento por el Covid, volvemos a otro que nos dificulta, aún más, volver a empezar de cero, comenzar a conseguir una clientela que ya nos había costado alcanzar". Esta vez, con algo más de complejidad porque "la sensación de incertidumbre e inseguridad por la cercanía de los conatos es terrible".

En este sentido, afirma que "antes lo que buscaba la gente era monte, senderismo, distracción, entretenimiento, naturaleza y ahora lo que hay es todo lo contrario, un desierto, la gente no viene por miedo y es normal". La empresaria señala que la sensación es de "echarse a llorar, no dan ganas de otra cosa tras ver que no tenemos nada".

Hoyos muestra su preocupación por la reactivación de algunos focos cerca de su restaurante y la necesidad constante de limpiar cenizas o cortezas. Además, hace alusión a la cantidad de humo en la zona, "estamos muy pegados a la zona donde más fuerte ha sido el incendio, tenemos que estar pintando o limpiando para mantener bien nuestro local y, en ocasiones, tenemos dificultad de respirar por el humo".

"Esto es una catástrofe para todo el mundo, más aún para la economía y el empleo, porque nosotros no podemos cerrar, generamos trabajo y de esto vivimos"

Asimismo, comenta que la situación va más allá. "Esto es una catástrofe para todo el mundo, más aún para la economía y el empleo, porque nosotros no podemos cerrar, generamos trabajo y de esto vivimos", resalta. En referencia a ello, aclara que "cada restaurante de la zona tiene mínimo dos personas trabajando".

Por último, lamenta la cantidad de territorio quemado alrededor de su negocio y en el municipio de El Rosario. Hoyos subraya que "mi restaurante se encuentra en una zona de monte donde, alrededor, hay mucho suelo agrícola que se ha perdido, donde cultivaban de todo y, por el estado en el que se ha quedado tras el incendio, no va a haber nada, algo que no se puede describir".

Se autoriza el realojo de 20 personas de Santa Úrsula que permanecían desalojadas

El Cabildo de Tenerife ha autorizado la vuelta a sus viviendas de las 20 personas de Santa Úrsula que continuaban evacuadas por precaución con motivo del incendio forestal. Asimismo, se ha autorizado el acceso a la zona de Las Lagunetas (El Sauzal, El Rosario y La Matanza), La Orotava y los núcleos de Los Pelados y Las Dehesas (Güímar) a los propietarios de fincas, instalaciones agrícolas y cuartos de apero, aunque con las restricciones de grado 3 en las que se prohíbe hacer fuego y la utilización de maquinaria y herramientas que provoquen chispas, entre otras medidas.

El Cabildo mantiene un operativo de 135 personas sobre el terreno afectado por el incendio forestal, a los que hay que unir los cuatro helicópteros –dos del Cabildo y dos del Estado-, junto al personal de coordinación y logística que continúa trabajando en la emergencia. Los efectivos de tierra pertenecen a las Brigadas Forestales y personal de los Cabildos de Tenerife, La Palma, La Gomera, El Hierro, el Consorcio de Bomberos de Tenerife y las empresas Tragsa y Gesplan.

Endesa sustituye una treintena de postes y tres kilómetros de cable trenzado

La filial de Redes de Endesa, e-distribución, ha sustituido ya una treintena de postes y tres kilómetros de cable trenzado de baja tensión que sufrieron daños irreparables como consecuencia paso del fuego.

Los técnicos de Endesa han realizado una primera evaluación de los daños originados en las redes eléctricas y consideran que el trabajo, de estrecha colaboración realizado con el operativo de extinción, ha permitido que las infraestructuras eléctricas, especialmente los centros de transformación, no se hayan visto afectados a pesar de la voracidad del fuego. El Ravelo, en El Sauzal, y Aguamansa, en el municipio de La Orotava, son los núcleos que más han precisado de la renovación de postes y cables.

Desde el inicio del incendio e-distribución, la filial de Redes de Endesa, mantuvo varios equipos desplegados en los puntos claves del perímetro marcado por el incendio de Tenerife para colaborar con el operativo de extinción y velar por la seguridad de las redes y otras infraestructuras eléctricas. A mediados de la semana pasada, los operarios de Endesa y empresas colaboradoras ya accedieron a hacer un reconocimiento de las zonas que se han visto afectadas por el fuego. Inmediatamente, iniciaron la labor de reposición de postes y tramos de cable trenzado totalmente quemados. La tarea resultaba aún dificultosa por las altas temperaturas que desprendía la tierra y por la sequedad ambiental, por lo que, en algunos casos, se hizo precisa la utilización de motobombas que contribuyeran a enfriar la tierra para luego proceder a la sustitución de los postes dañados.