Demasiados trastos turísticos
Santa Cruz de Tenerife
Cada isla es un mundo turísticamente hablando, aunque Islas Canarias sea la marca común, el paraguas, bajo el que cada una se promociona en sus mercados. Y no todas evolucionan de la misma manera: sus principales mercados emisores, las características de su planta alojativa y su capacidad para vender algo más que "sol y playa" condicionan su mayor éxito o fracaso.
Todas presentan cifras buenas, porque este privilegiado clima canario atrae a nuestras costas a una pléyada de ciudadanos de Europa del Norte que vienen a descongelarse. Pero tenderse al sol no es ya suficiente para un creciente número de visitantes y Canarias no termina de ofrecer alternativas de ocio y entrenimiento potentes y de calidad.
Además, conviven en nuestras zonas turísticas ofertas de alta o altísima calidad con bodríos de los ochenta, que lastran la imagen del destino. Y ya hay síntomas, ocultos tras el espejismo de los cifras, de que esta obsolencia de servicios e infraestructuras está pasando factura a algunas islas.
La tendencia solo se puede contener con una renovación real de estos espacios. Todos los saben, lo sabemos, pero ahí siguen demasiados trastos turísticos varados en sus destinos legislatura tras legislatura, gobierne quien gobierne.

Marta Cantero
He trabajado en diversos medios de comunicación de las Islas, tanto en Gran Canaria como en Tenerife,...




