"Se orinan encima y no les limpian ni el culo": la denuncia de los familiares de un centro para personas con discapacidad de Gran Canaria

Los hijos de Raquel pasan el día en el centro de atención a personas con discapacidad intelectual gestionado por la empresa «Grupo 5» en San José de Las Longueras, en Telde, que depende del Cabildo de Gran Canaria. En más de una ocasión han vuelto a casa con golpes, con las gafas rotas, con puntos o con la silla averiada. «Al principio pensaba que era un centro normal, pero poco a poco me di cuenta de que pasaban cosas. Las camisas rotas, rajadas, la ropa desteñida y encogida. Golpes, puntos, roturas en la silla o en las gafas», denuncia Raquel. Esta empresa gestiona en Gran Canaria alrededor de 270 plazas residenciales y unas 120 de estancia diurna, y presta servicios de atención a la dependencia y la capacidad funcional, atención a la salud y psicosocial, entre otros. Raquel tiene allí a dos de sus hijos y más allá de la situación en la que llega a casa su ropa, las magulladuras y las averías en la silla en los transporta, denuncian la falta de higiene que sufren las personas con discapacidad en el centro. Por ejemplo, ha detectado a sus hijos no les cepillan los dientes o que directamente no les limpian cuando van al baño. Nereida es otra de las madres de este centro y cuenta que los responsables permiten que su hija se orine encima antes de llevarla al baño. Además, denuncia que no le lavan correctamente al salir del baño. «No la dejan ir al baño, le dicen que está ocupado y cuando finalmente la llevan al baño ya se ha orinado encima», denuncia Nereida. «En cuanto al culete, no se lo limpian. Le dirán: súbete y límpiate tú», añade. Algo similar ocurre con los familiares de Raquel, que llegan a casa con una mala higiene bucodental. «No hay higiene en la boca, el personal no sabe bien manipular la silla de mi hijo y se rompe a cada rato», cuenta. La hija de Nereida también ha sufrido quemaduras en una rodilla tras caerse en el interior del centro, justo antes de que «Grupo 5» ganara el concurso. «Ese día llevaba pantalón corto, se cayó y supuestamente se quemó con el corcho del suelo, pero eso no es cierto. La niña llevaba pantalón corto, pero es imposible hacerse una herida como esa con una caída, tuvieron que haberla arrastrado, porque si no es imposible», denuncia Nereida, que acompaña su relato con las con las fotografías que muestran las heridas que ha sufrido su hija. Los familiares que llevan a sus hijos a esta residencia del Cabildo llevan tiempo soportando esta situación. Sin embargo, lo que ha hecho saltar todas las alarmas es una circular que han enviado a los familiares en la que advierten que a partir de ahora beberán agua del grifo, y no agua embotellada, como venían haciendo hasta ahora y como ocurre en el resto de residencias de Gran Canaria. «El agua del grifo no se le da a nadie», denuncia Nereida. En Gran Canaria prácticamente todo el mundo consume agua embotellada o filtrada. «Que yo sepa en Gran Canaria nadie bebe agua del chorro», denuncia Raquel, que ha decidido llevar agua embotellada para sus hijos. El Cabildo de Gran Canaria ha amenazado con sancionar a la empresa si finalmente ejecutan la orden de beber agua del grifo, tal y como hacen en otros centros que gestionan en España. La consejera de Derechos Sociales del Cabildo de Gran Canaria, Isabel Mena, habla de «hechos puntuales», pero anuncia el incremento de las inspecciones. De hecho, en la última inspección a este centro realizada hace quince días, no detectaron ninguna de las anomalías denunciadas por los familiares. «Puede que haya ocurrido eso en algún caso concreto, pero los cuidados que reciben los chicos y chicas están dados por profesionales que llevan muchos años», explica Mena. «Yo comprendo perfectamente a los padres y madres porque cuando ocurre algo, aunque sea un incidente, le ocurre a tu hijo», añade. «Tras la denuncia de los padres y madres hemos mantenido varias reuniones con la empresa y hemos incrementado las inspecciones que hacemos al propio centro», anuncia la consejera en la SER. La institución insular da credibilidad a las familias y reconoce que hay problemas para sustituir el personal de enfermería los fines de semana. Además, toma partido por ellas y prohíbe a la empresa «Grupo 5» dar agua del grifo a los residentes. «Hicimos un requerimiento a la empresa, que es de la península. Les hemos explicado que la realidad de Gran Canaria es distinta a la de la península y aquí en ningún caso se va a dar agua que no sea embotellada», añade.

"Se orinan encima y no les limpian ni el culo": la denuncia de los familiares de un centro para personas con discapacidad de Gran Canaria

Un grupo de familiares de personas con discapacidad que acuden a un centro especializado en San José de las Longueras, en Telde, denuncia en la SER la situación que están sufriendo desde hace meses

Webs de PRISA