Opinión

Incendiar la calle

LA MIRADA 7 NOVIEMBRE

Santa Cruz de Tenerife

Una cosa es manifestarse contra una medida de un Gobierno, para lograr que la presión social modifique un decisión con la que no se está de acuerdo, y otra muy distinta incendiar la calle deslegitimando el derecho mismo de ese Gobierno a existir.

A la frustración de la derecha española por no haber llegado a gobernar, como creía que ocurriría tras las últimas elecciones, se ha sumado la polémica decisión de Pedro Sánchez de amnistiar a los independentistas catalanes. Es comprensible que la medida no se comparta y que se movilicen quienes se oponen, lo que no es aceptable de ninguna de las maneras es la voluntad de linchamiento que les mueve.

Ante esta toma de la calle por parte de la derecha radicalizada, es clave la respuesta que dé la izquierda. No toca echar leña al fuego con descalificaciones incendiarias, es hora de saber leer la gravedad de las circunstancias que vive el país y actuar con altura política. Aparcando, por ejemplo, el lenguaje guerracivilista, que en nada ayuda a serenar los ánimos. Todo lo contrario, da munición a quienes buscan ganar adeptos.

Marta Cantero

He trabajado en diversos medios de comunicación...