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Canarias, paraíso para la okupación de viviendas vacías

El Archipiélago junto a Asturias son las comunidades autónomas que han registrado un mayor número de denuncias por este tipo de delitos durante los cinco primeros meses del año

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Santa Cruz de Tenerife

En Canarias crece la okupación de viviendas vacías, al ser una de las comunidades autónomas junto a Asturias con mayor incidencia en lo que llevamos de 2023. La indefinición legal, la incertidumbre económica y la inflación han provocado un repunte de incidencia y, por consiguiente, de denuncias de este tipo de delitos que ha encontrado en Canarias su paraíso. Las islas de Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife, las que registran el mayor volumen de incidencia.

Una situación que "no tiene justificación", pero "es entendible". De esta manera, la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Inma Évora ha querido poner mesura a una situación que va a más en Canarias. Así lo reflejan los últimos datos del Ministerio del Interior, los que corresponden a los cinco meses iniciales de este 2023. Entre enero y mayo, se produjeron en las islas 234 okupaciones, las conocidas y contabilizadas por el departamento que dirige Fernando Grande - Marlaska. Unas cifras que responden al contexto social que se da en el Archipiélago, según ha explicado la activista social. Si se tiene en cuenta el nivel de pobreza existente en Canarias, 1 de cada 3 isleños se encuentran en pobreza extrema o bajo su umbral, la inexistencia de un parque de viviendas públicas, los elevados precios del alquiler "es normal" que haya aumentado la okupación. Sin embargo, Évora ha precisado que "no se trata de un aumento significativo" para "las circunstancias que estamos viviendo".

Eso sí ha pedido establecer una diferencia que considera esencial. No es lo mismo la okupación por necesidad, a la que considera que "no se ha de criminalizar" que la perpetrada por las mafias. Para ellas si ha pedido mano dura y "un tratamiento diferente" sin ningún tipo de miramientos. De hecho, en un informe elaborado por Línea Directa un 31% de los encuestados reclaman una actuación policial contundente contra las mafias. Pero, también, en ese mismo estudio 2 de cada 3 personas solicitan un endurecimiento de las penas y mayor agilidad a la hora de realizar los desalojos.

Inma Évora es partidaria de potenciar los parques de viviendas públicas o gestionar mejor aquellos inmuebles que están vacíos como alternativas para darle una solución habitacional a los centenares de canarios que la necesitan. Porque, bajo su óptica, los lobbies financieros ganan cada vez más terreno y "se lo están comiendo" a la función social que ha de tener la vivienda, que no es otra que la de "dar techo a las familias". Un objetivo que, ha lamentado, "se ha quedado atrás".

Exclusión residencial

Una línea argumental que, también, ha defendido, Fernando Rodríguez, responsable de la Asociación Provivienda y a la que ha añadido un matiz que considera "hiriente y doloroso". "La vivienda es el principal factor social de exclusión en Canarias", ha argumentado para afirmar que "la okupación no debe ser una alternativa", pero sí demuestra que la carencia de políticas efectivas en materia de vivienda es un lastre muy importante. Y ha mirado a las administraciones públicas para solicitarles que tienen un deber, dotar de viviendas a los familias que más lo necesitan". Para lograr ese objetivo, Rodríguez les ha marcado la hoja de ruta. Han de cambiar el sistema de acceso para que puedan comprarse o alquilarse inmuebles a precios "asequibles", porque lo que está sucediendo ahora es que las familias viven tan endeudadas que les es imposible afrontar los pagos a los que tienen que hacer frente.

Tras hacer esta radiografía Fernando Rodríguez ha hecho un ruego. "No criminalicemos la okupación, la mayoría se produce por necesidad". Pero "no la defendemos". Una precisión con la que ha querido salir al paso del siguiente dato. Uno de cada dos propietarios de una vivienda vacía temen la okupación. Una conclusión extraída de un informe de Fotocasa, cuya preocupación comparte, pero a la que aporta alternativas. Pasarían por poner en alquiler viviendas vacías o programas de incentivos para acceder a un arrendamiento pero "seguros para las familias". Porque su pregunta lanzada al aire lo resume todo. "¿Quién no está siendo vulnerable hoy con el acceso a la vivienda con precios tan tensionados?".

Crece la venta de vivienda okupadas en Canarias

Lo que también ha crecido en lo que llevamos de año es el número de inmuebles a la venta con okupas en su interior. Los vendedores de dichos pisos ofrecen una compensación, una rebaja en el precio ante inconvenientes tales como tener que ser el comprador quien active el procedimiento legal para desalojar a los okupas que puedan residir en la vivienda, o adquirir los mismos sin poder comprobar, in situ, su estado y sus características reales. Para el experto inmobiliario, Aythami Rivero "el comprador sabe que tiene que comprar una casa con un problema y que tendrá que solucionar la situación y se ve en los precios. Un okupa devalúa el precio de la vivienda y eso debe saberlo el propietario y el inversor que va a comprar esa casa para beneficiarse de la situación".

Existen potenciales inversores que son especialistas en comprar este tipo de propiedades. Se encargan de comprarlas y desalojarlas con el proceso judicial correspondiente para luego revenderlas "hay inversores que les interesa comprar las casas con okupas, son inmuebles que a veces tienen descuentos de hasta el 50% y aceptan el riesgo y esa posibilidad de que puedan tener congelado el dinero durante un tiempo" apunta Rivero.

La media de vivienda pública en Europa, con respecto al total de la vivienda es del 9,3%, mientras que en Canarias es de apenas el 0,96%. Es decir, que los canarios tienen como media 10 veces menos posibilidades de acceso a que las autoridades les facilite un techo bajo el que dormir frente a la media del conjunto de los ciudadanos de la Unión Europea. Esto, unido a los altos precios inmobiliarios, está convirtiendo esta práctica en una oportunidad para muchos de acceder a una vivienda digna.