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Sociedad | Actualidad

Cáritas alerta: "Con 1.300 euros no da para vivir si no se hacen malabares"

La entidad detecta impedimentos por parte de los ayuntamiento para empadronar a personas que necesitan ayudas sociales

Ni pollo, ni pescado, ni zapatos: el 7% de los canarios no pueden comprar lo más básico / pixabay

Santa Cruz de Tenerife

La cronificación de la pobreza marca la recta final de este año 2023 que Canarias está a punto de despedir. La vulnerabilidad y la exclusión se han convertido en una foto fija en el Archipiélago para miles de familias. Según los últimos datos de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión social, 287.286 isleños sufren pobreza severa y 787.860 se encuentran en riesgo de pobreza y/o exclusión social.

Es una realidad que a diario constata Cáritas, que además ha detectado que algunos ayuntamientos están poniendo trabas en el proceso de empadronamiento. El secretario general en Tenerife, Ricardo Iglesias, alerta de la gravedad de esta situación ya que los consistorios son la puerta de entrada a los servicios sociales básicos para gran parte de la ciudadanía. "Como decía una compañía, es que es un Excel. Un Excel donde yo apunto a una persona que se identifica y que dice que está viviendo en un municipio. No hay que pensar si tiene derecho o no a apuntarse, hay que apuntarlos", insiste.

El responsable de Cáritas Diocesana en Tenerife explica que a menudo se encuentran con "desesperanza" y "miedo" entre las personas que atienden. Pasan los años y los dirigentes políticos, pero la situación de pobreza continúa en Canarias: "Cuando hay situaciones de pobreza y exclusión que se alargan en el tiempo, es difícil encontrar esperanzas. Uno va poniendo sus esperanzas en cambios políticos, cambios sociales... Cuando esos cambios se dan y no pasa nada, la gente se desmoraliza".

Ricardo Iglesias: "Las cuentas de la redistribución de la riqueza no cuadran"

Redistribución de la riqueza

El Índice de Precios al Consumo aumentó un 4,3% en octubre en su tasa interanual. La subida más acentuada se encuentra en la cesta de la compra, y es que los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas se encarecieron de octubre de 2022 a octubre de 2023 un 12%. A esto se suman los constantes encarecimientos de la vivienda. El precio de la vivienda libre en Canarias subió un 4,5% en el tercer trimestre del año respecto al mismo periodo de 2022 impulsado, sobre todo, por la obra nueva, que disparó su precio un 11%, su mayor crecimiento en 16 años, según las últimas cifras del Instituto Nacional de Estadística.

Iglesias llama a plantear la redistribución de la riqueza, "cómo hacer que esa riqueza que se está generando de verdad impacte en la sociedad canaria y, sobre todo, en la sociedad más joven". Muestra especial preocupación por estos grupos de edad ya que "son las que al final no están saliendo adelante". El secretario general pone como ejemplo los salarios y pide un punto de inflexión, y es que "una persona que esté trabajando ahora en cualquier hotel, que esté cobrando entre 1.300 y 1.600 euros, a día de hoy no da para vivir. A no ser que se comparta vivienda o se hagan malabares para llegar a final de mes, esto no da".

El sinhogarismo, en el centro de las iniciativas de Cáritas

Canarias tiene unas 20.000 familias en lista de espera para acceder a la vivienda social. Como consecuencia de estas cifras, Iglesias reconoce que echa de menos políticas más "valientes" porque "siempre es 'vamos a empezar a hacer'. Y ese 'vamos a empezar a hacer' no acaba de hacerse". También puntualiza que en 2021, Cáritas Diocesana identificó a 2.738 personas en situación de exclusión residencial extrema en Tenerife.

"El acceso a derechos de las personas sin hogar es muy dificultoso. Viven situaciones muy complejas. Eso de las agresiones. El perfil de mujer encima es un perfil muchísimo más complicado", destaca resaltando también "la salud menta vinculada a las personas en situación de sin hogar, o el tema de las adicciones, o la problemática de patología dual" como un aspecto que deben abordar las administraciones públicas.