Desalojan a cien familias okupas en el sur de Lanzarote

Arrecife

Las cien familias que residían como okupas en una urbanización de Playa Blanca, en el municipio lanzaroteño de Yaiza, han comenzado a desalojar este martes las viviendas en las que residían. Desde primera hora de la mañana, agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Yaiza han acudido a la zona para comprobar que se cumplía con el mandato judicial para desocupar los apartamentos, sin terminar de construir, en los que venían residiendo un centenar de familias con más de veinte menores a su cargo, como se puede observar en las imágenes que ha recibido SER Lanzarote.

Las familias desalojadas residían en treinta y cinco viviendas abandonadas en la localidad turística de Playa Blanca y ya el pasado 27 de octubre de 2023 habían recibido una notificación de la Guardia Civil para desocupar esos inmuebles antes del 31 de ese mes. Fue en ese momento, cuando las familias presentaron en el juzgado una solicitud de prórroga.

El Juzgado de Instrucción número 4 de Arrecife decidió conceder "un plazo razonable" de dos meses de aplazamiento y fijo el mismo inicialmente para el 3 de enero aunque posteriormente, se alargó hasta este martes día 16.

El magistrado Ricardo Fiestras, hacía referencia a numerosos escritos presentados en sede judicial solicitando la suspensión o aplazamiento del alzamiento y añadía que se tenía en cuenta "la complejidad de la presente causa", el gran número de personas afectadas y la "situación de necesidad alegada por la mayoría como consecuencia de la premura del presente alzamiento". Por otro lado y aunque se debería haberse celebrado un juicio el pasado 10 de enero, el mismo no ha tenido lugar.

Sin embargo, el mismo Juzgado se ha apoyado en un informe técnico municipal del Ayuntamiento de Yaiza en el que, según uno de los okupas, "dice que las viviendas están en riesgo de ruina o derrumbe", algo que niegan las personas que residen en los apartamentos pues aseguran que ellos mismos se han encargado de adecuarlas.

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Los okupas lamentan que ahora no tienen dónde ir, con agravante de que algunas familias tienen menores a su cargo. En el recuento que se llevó a cabo a finales del mes de diciembre, se constató que residían unas 99 personas, de las que 75 son adultas y 24 menores de edad.

Además, los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Yaiza emitieron un informe en el que se reflejaba que entre las familias que habitan las viviendas, había a finales de octubre del pasado año 2023 un total de cinco mujeres embarazadas, personas mayores, personas con discapacidad y algunos con diagnósticos de oncología.

Los okupas señalan que en algunos de los casos, hay personas que trabajan y "pueden pagar un alquiler" pero no lo encuentran porque "el alquiler en Playa Blanca está por encima de los mil euros y se han disparado y además no hay viviendas para alquilar, está escaso".