Una fiesta 'rave' en el Confital se salda con 14 personas multadas

Las Palmas de Gran Canaria

El Confital fue el escenario la madrugada del pasado domingo de la última fiesta 'rave' celebrada en Canarias. En total, la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria interpuso 14 sanciones a los participantes de ese evento ilegal que además se celebraba en un espacio protegido. Sin embargo, el número de asistentes fue aún mayor, en torno a medio centenar que se congregaron en ese lugar convocados horas antes por redes sociales.

Ese entorno natural fue el elegido por los organizadores para instalar una pantalla gigante, una mesa de mezclas y altavoces alimentandos por un generador de electricidad. El elevado volumen de la música, que comenzó a escucharse sobre las 23.30 de la noche del sábado, provocó que varios vecinos se pusieran en contacto con la Policía Local y el Centro de Coordinación de Seguridad y Emergencias 112 para denunciar los hechos.

Al llegar los agentes los asistentes salieron huyendo del lugar aunque lograron imponer multas a 13 personas por consumo de alcohol y una por tenencia y consumo de drogas. Además se indentificó al supuesto organizador de la fiesta ilegal.

La segunda 'rave' del año

Las raves suelen organizarse en lugares abandonados o zonas rurales. Este tipo de fiestas ilegales que reúnen a un gran número de asistentes a través de las redes sociales no es un fenómeno nuevo en Canarias, tampoco en la capital grancanaria. De hecho, hace solo dos semanas, la Policía Local de La Oliva identificó a los promotores de una fiesta no autorizada en lo alto del Calderón Hondo, un espacio nactural de alto valor paisajístico incluido en la Red de Senderos de Fuerteventura. Una fiesta celebrada en la cima del volcán donde los organizdores celebraron una fiesta 'rave' a la que acudieron un centenar de personas.

La capital grancanaria ha sido también escenario de múltiples fiestas de este tipo. 2021 fue un año en el que se dispararon las denuncias por este motivo en el municipio por incumplir además las restricciones establecidas con motivo de la Covid, unas fiestas ilegales que también se organizaron años antes en edificaciones abandonadas en barranco seco o el barranco de Guiniguada.

Las sanciones establecidas para este tipo de fiestas no autorizadas van desde los 100 euros hasta los 600.000 euros en función del número de personas congregadas, siendo la sanción más leve si el evento ilegal congrega a menos de 15 personas y muy grave si se congresgan más de 150 personas.