"He puesto más de 10 denuncias": pacientes indignados y sanitarios agotados, el día a día de la Sanidad en Canarias
Los servicios de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias y del Hospital Insular de Gran Canaria se encuentran entre los más denunciados ante el Defensor del Paciente
Santa Cruz de Tenerife
Quedan apenas seis minutos para las nueve de la mañana, nos encontramos en el servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias, donde cada vez se acercan más personas con las mascarillas cubriendo nariz y boca, como pide la normativa impuesta desde el pasado 8 de enero por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias. Se comienza a formar la famosa cola de las esperas para ser atendido, que cada vez ocupa más parte de la acera. Pasamos dentro y podemos ver cómo el personal sanitario traslada a pacientes en camillas, otros organizan el material necesario para consulta y organizan el trabajo del día.
Los servicios de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias y del Hospital Insular de Gran Canaria se encuentran entre los más denunciados ante el Defensor del Paciente. Son dos de los más "colapsados" del país, según la asociación, algo que los ciudadanos ponen de manifiesto continuamente. No son los únicos servicios sanitarios con reclamaciones, a ellos se suman la lista de espera para especialistas y las citas quirúrgicas con 37.000 pacientes a la espera de ser atendidos en toda la comunidad autónoma de Canarias.
Trato deficiente según los pacientes
El Archipiélago aglutina 275 denuncias, de las cuales 15 han sido fallecimientos, si bien ha habido una bajada del 4,5%, constituyendo la cifra más baja de denuncias de la última década. Los pacientes del Hospital Universitario de Canarias añaden el trato por parte de los sanitarios y diagnósticos precoces entre las principales reclamaciones.
“La última denuncia que puse fue en mayo del año pasado debido a que la doctora que me operó realizó una negligencia médica y tengo una rotura en el manguito rotador y fisuras. Mientras mi marido estuvo vivo llegué a poner más de diez debido a que se quejaba del dolor de la pierna, los médicos no le dieron importancia y se agravó y se convirtió en un problema muy serio".
“Llevo con el niño en urgencias desde las cinco de la mañana y lo han ubicado en una silla de ruedas en vez de en una camilla porque todas están ocupadas. Pero, los sanitarios hacen lo que pueden con lo que tienen, no hay más”. Son precisamente los colapsos en esta área la principal denuncia médica por una gestión deficiente, en la que las plantillas de sus profesionales están en malestar, estrés y agotamiento. Además, suelen ser servicios con deficiencias similares durante repetidas etapas del año, pacientes hacinados por falta de espacio, insuficiente número de camas, y horas de espera hasta recibir asistencia o colapso.
En la otra parte de la balanza, los profesionales sanitarios dicen que se encuentran en una situación de continuo malestar, estrés y agotamiento debido a la saturación del servicio y la falta de personal. Por lo que, reclaman ampliación de plantilla y mejora de servicios.