Siete años para autorizar las obras del Museo Néstor
El Cabildo de Gran Canaria permite la rehabilitación del edificio con varios requisitos
Las Palmas de Gran Canaria
Esperaba desde 2017. El Museo Néstor languidecía cerrado y esperando que el proyecto de rehabilitación fuera permitido por el servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria, que estaba incluido como una de las fases de la reforma total del Pueblo Canario, creación del propio Néstor Martín Fernández de la Torre junto a su hermano y arquitecto Miguel. La obra de mejora de la instalación principal entró en el acuerdo del ayuntamiento de Las palmas de Gran Canaria con el grupo hotelero Barceló cuando éste ganó el concurso de gestión del Hotel Santa Catalina, que es propiedad municipal.
Actualización con ampliación por el jardín
La propuesta del Ayuntamiento capitalino aprobada ahora incluye, entre otras acciones, la incorporación de aseos exteriores y aulas; cambios de tabiquería y conexiones interiores; plantea edificar otro nuevo cuerpo de dos plantas, en la fachada posterior, para contener el ascensor e instalaciones, así como modificaciones funcionales de la tabiquería en áreas secundarias, de seguridad de uso y de evacuación, e intervenciones de accesibilidad física, tales como una escalinata y una rampa de acceso principal, otra rampa interior y dos escaleras nuevas, una al sótano y otra de servicio a los cuartos de máquinas.
Todo ello junto a nuevas instalaciones de saneamiento, fontanería, contraincendios, eléctricas, de iluminación, de ventilación, aire acondicionado, telecomunicaciones, datos, alarma y seguridad, además de obras de mantenimiento y restauración, como el retejado e impermeabilización de cubiertas, impermeabilizar muros mediante resinas y gel, pavimentos interiores, fachadas, limpieza de piedras, rozas, morteros, pintura color blanco, carpintería y cerrajería.
Y a la vista de esta propuesta, el Servicio de Patrimonio Insular del Cabildo ha determinado varias condiciones a cumplir para hacerla asumible, que pasan por la retirada de todas las instalaciones de agua del interior del almacén de cuadros y la eliminación de su puerta trasera, y por la necesidad de que la impermeabilización de la cubierta sobre el almacén sea continua para evitar riesgos. Se deben eliminar del proyecto las unidades de obra de levantamiento de pavimentos de las salas 2,3,4 y del hall-salón principal, y las relacionadas con ella; que hay que mantener el pavimento original de la conserjería y de las oficinas, en donde se dispondrán piezas de mármol blanco en el lugar de los tabiques a demoler y que la nueva tabiquería se realizará mediante ‘tabiquería seca’, y que el pavimento del sótano de zonas históricas, ha de ser igual o equivalente a los originales del monumento, en color rojo y/o beige, y en un formato no mayor de 40x40 centímetros.
Del mismo modo, incide en que el mortero y el color exteriores del nuevo volumen vertical de ascensor tendrán que ser iguales al del resto del conjunto del Pueblo Canario y en que no se admitirá el estuco vítreo.
En lo que se refiere a las barandillas del inmueble, el informe estipula que la restauración de todas las interiores se ejecutará ‘in situ’, que las de la escalera no se desmontarán ni se reubicarán a mayor altura y que el nuevo diseño de los pasamanos tendrá que atenerse a esas condiciones, y, en caso de que se opte por otro, se requerirá la autorización del Cabildo.
El Servicio establece, igualmente, que el proyecto cumplirá estrictamente la normativa, en especial en materia de seguridad de uso y accesibilidad, ya que, como refiere, “dado el alcance, coste y ‘excepcional’ nivel de intervención admisible, consideramos que no sería proporcional eludir la máxima seguridad y calidad de uso, especialmente con los usuarios y usuarias que más lo necesitan”.