Hasta 1300 euros al mes por vivir en el sur de las islas: los canarios destinan, al menos, un 40% de su sueldo al alquiler

Santa Cruz de Tenerife

Actualmente conseguir un alquiler asequible en las capitales canarias es misión imposible. Según los últimos datos de portales como Idealista y Fotocasa Canarias se encuentra en el ranking de comunidades autónomas donde su población tiene que hacer mayor esfuerzo económico para pagar el alquiler. La tasa de esfuerzo es del 45% en la provincia de Las Palmas y del 41% en la de Tenerife.

Según varios informes, el precio medio de la vivienda en Canarias ha experimentado una subida del 6% interanual en los primeros tres meses del año, posicionándose como la cuarta comunidad autónoma donde más ha subido la vivienda en España por detrás del archipiélago de Baleares, Comunidad Valenciana o Andalucía.

Algunos achacan precisamente al turismo y al auge del alquiler vacacional que el mercado inmobiliario esté asfixiando a los canarios, sobre todo en las grandes ciudades y en los municipios turísticos. Desde los sindicatos de inquilinos denuncian que en una década el precio de los alquileres se ha duplicado por la especulación, cosa que no ha pasado con los salarios, lo que tiene como consecuencia el aumento de la pobreza entre las familias canarias. Víctor Martín, representante del sindicato de Inquilinas de Tenerife dice que las consecuencias de la subida de los precios del alquiler se traduce en el auge de infraviviendas: "han aparecido barrios de chabolas donde nunca antes. Este fenómeno era algo inédito, y ahora están en casi todos los municipios porque a la gente se le hace imposible pagar un alquiler".

Alquileres que sobrepasan los tres dígitos

Haciendo un recorrido por webs de portales inmobiliarios un piso de una habitación tanto en Santa Cruz de Tenerife como en Las Palmas de Gran Canaria ronda los 900 euros, una situación que se complica en municipios turísticos como es el caso de Arona o San Bartolomé de Tirajana, donde un piso con las mismas características puede llegar a costar 1300 euros mensuales.

Incluso, alejando la lupa del centro de las ciudades, en los barrios periféricos a la capital los alquileres no dan mucho respiro. En la zona de Ofra - Costa Sur, en Santa Cruz de Tenerife, los pisos de una habitación rondan los 600 euros, al igual que en el área de Tamaraceite, en Las Palmas de Gran Canaria, los alquileres están entre los 600 y 800 euros al mes.

Pero, este problema no solo abarca a las islas capitalinas, sino que Lanzarote, Fuerteventura y algunos sectores de La Palma ya se empieza a notar los precios desorbitados de los alquileres. En el municipio lanzaroteño de Teguise, los alquileres disponibles no bajan de los 1200 euros, al igual que en el municipio de La Oliva, en Fuerteventura.

El alquiler en Canarias se ha duplicado un 105% en la última década, posicionándose por detrás de Baleares, donde el aumento se cifra en un 120%. Desde el sindicato de Inquilinas de Tenerife exigen un control del precio del alquiler y que se vele por todas aquellas familias que deben hacer frente a su día a día "Antes, en el 2014, una familia que firmaba un contrato de alquiler en un periodo de 5 o 7 años podía hacer frente a un precio mensual de 350 euros al mes en una casa de dos o tres habitaciones. Ahora, que se están abandonando ese tipo de contratos, si no hay un control del precio de los alquileres todas esas familias no van a poder hacer frente a alquileres más caros con los costes mensuales que tienen y acabarán como las familias desalojadas en el Edificio Chasna, en Arona, que están viviendo en casetas de campañas y chabolas justo enfrente del propio edificio".