Ramo de cardos
De repente, la derecha de este país acaba de descubrir la importancia de las Elecciones Europeas, pero no lo hace por el innegable valor intrínseco a las instituciones comunitarias, sino porque vislumbran en la convocatoria del próximo 9 de junio, la oportunidad de dar una vuelta de tuerca más al cuello de Pedro Sánchez interpretando las mismas como un plebiscito, que en caso de derrota socialista, entienden que irremisiblemente obligaría al desalojo de La Moncloa, o al trofeo nada desdeñable, de una convocatoria de Elecciones Generales que los socialistas ven más perdidas que la Guerra de Cuba, a excepción de José Félix Tezanos, que es al PSOE lo mismo que “Manolo el del Bombo” a la Selección Española de Fútbol.
La democracia es votar, pero ejercer el voto en las actuales circunstancias se convierte en algo así como ir a comprar pan, un domingo a las dos de la tarde, con el aire pleno de calima y con el termómetro marcando 40 grados de temperatura,
Asistimos a la bronca de siempre, pero con mayores niveles de crispación, desesperación y ganas de sangre.
La suma de todo ello propicia un lunes de pereza en un país que desde hace tiempo apila semanas y meses cargados del tedio del odio y la rabia.
Y para rematar este último lunes del “mes de las flores”, nos encontramos con las mutuas demandando intervención en los procesos de recuperación de los trabajadores de baja por el altísimo absentismo que registra el mercado laboral.
A las tan preocupadas mutuas por la recuperación de la salud de los trabajadores, me pregunto por qué no averiguan lo que sucede en muchísimas empresas y que causa directamente la merma de la salud de los asalariados que nunca tuvieron la voluntad de escaquearse de sus puestos de trabajo.
En mayo, en el mes de las flores, reciban un ramo de cardos con todo mi desprecio personal.
