Moha Ramos deberá cumplir condena por delito contra la seguridad vial

Santa Cruz de Tenerife

No corren buenos tiempos para el joven portero Moha Ramos, que tras su detención en Lanzarote el pasado sábado y su puesta a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción n.º 1 de Arrecife, ha conocido este lunes que deberá ingresar en prisión por un delito contra la seguridad vial por conducción bajo los efectos del alcohol y dos delitos de lesiones, hechos que se remontan a su etapa en Madrid siendo futbolista de la base del Real Madrid en 2019.

El futbolista del Tenerife B, de 24 años fue detenido el sábado en Yaiza (Lanzarote), cuando se disponía a participar en un encuentro amistoso entre el club conejero y el filial blanquiazul. La guardia civil, siguiendo instrucciones del Juzgado de lo Penal Nº 7 de Madrid, que había enviado una requisitoria de la condena, que estaba suspendida hasta esa fecha. Por su parte, el CD Tenerife emitió ayer una nota oficial en la que se ponía "a disposición" de las autoridades. "El CD Tenerife SAD queda a total disposición de la autoridad competente, siempre en aras de esclarecer y de depurar responsabilidades. Igualmente, en la medida de las posibilidades, se insta a no llevar a cabo juicios paralelos sobre aspectos de índole estrictamente personal, y totalmente alejados de la práctica deportiva, del referido jugador", esgrimía la entidad tinerfeña en un comunicado oficial. Moha había renovado recientemente su contrato con el CD Tenerife, como avanzó la SER el pasado 9 de julio en un acuerdo que llevaba implícito un año con ficha del filial y dos opcionales con el primer equipo que habrían de ejecutarse antes del 31 de diciembre de 2024. El portero tinerfeño, de origen senegalés, ha pasado por varias etapas complicadas en su carrera, con varios episodios extradeportivos que han frenado la gran proyección que se adivinaba cuando hace siete años ganó el Europeo sub17 y fue convocado al Mundial de Clubes con el Real Madrid con apenas 17 años.