El escándalo de las comisiones: el CD Tenerife se dejó 1,2 millones en pagos a agentes de jugadores

Santa Cruz de Tenerife

1.259.800 euros. Es la cifra que el Club Deportivo Tenerife se dejó en agentes e intermediarios durante la temporada 2023/24, según las cuentas anuales de la institución, a las que ha tenido acceso la SER. Es una de las partidas más significativas en el desglose que rubrican todos los consejeros del club, a excepción de la dimitida Alba Aula Méndez, que dejó el órgano principal de gestión de la entidad en la segunda mitad de este año.

Fuentes del sector aseguran que esta cifra es difícil de asumir. Valga como ejemplo que en las cuentas del curso previo, el club solo se dejó en "honorarios de agencia e intermediación" un total de 188.300 euros.

Algunos de los accionistas de referencia consultados por la SER insisten en la conveniencia de que se realice una auditoría sobre la gestión deportiva realizada bajo el mandato de José Miguel Garrido como máximo accionista. Si bien el empresario madrileño no figura en el organigrama del club, su influencia es providencial en todas las decisiones importantes.

Durante el curso 2023/24 se realizaron muy numerosas operaciones (altas y bajas) en la recomposición del plantel que pasó a dirigir Asier Garitano. El alto flujo de transacciones es una tónica que se ha repetido durante este pasado verano. Además, se da la circunstancia de que algunas han sido con los mismos agentes.

En las cuentas que se someterán a aprobación del accionariado el próximo 17 de diciembre figura también un incremento notable en el concepto 'Precio de adquisición' de jugadores. De los 52.705,56 euros que se abonaron en este epígrafe en la 22/23, a los 410.000 euros que se pagaron un año después.

En el cajón desastre que supone otro concepto como el de 'Otros gastos' -relacionados también con la recomposición del primer equipo- se pasa de abonar 20.902,94 euros en la 22/23 a multiplicar esta cifra por más de diez: 234.809,21 euros en la 23/24.

En el informe de gestión se expone que estas cantidades "recogen los importes satisfechos por la adquisición de los derechos de los jugadores en concepto de tránsfer y contractuales, así como todos los gastos necesarios para la adquisición e inscripción de los mismos y bajas registradas".

Lo que omiten las cuentas es el detalle de las operaciones de venta de Loïc Williams (al Granada) y Álex Corredera (al Khimki ruso). Aunque se produjeron al cierre del curso pasado, era costumbre en el CD Tenerife dar detalles a los accionistas sobre las transacciones relevantes acaecidas en el tiempo transcurrido entre el fin de la temporada y la celebración de la Junta General.

El incremento en el gasto no solo se produjo en estos conceptos; también en la retribución de los consejeros, que se disparó por encima de los 411.000 euros, tal y como informó la SER este lunes. Además, en el cuarto punto del orden del día hay fijada una votación para abordar este asunto y fijar los emolumentos que se abonarán a Paulino Rivero y el resto de directivos, sin especificar más datos, al menos hasta la celebración de la asamblea.

Los detalles de determinados contratos recientes -incluido alguno de renovación- ha causado cierta irritación en personal del club adscrito a la secretaría general. En algunos casos, no se entienden las cifras que se están imputando a determinados jugadores, como tampoco las primas de fichaje ni los años de duración de los acuerdos suscritos en los últimos meses por parte del consejero Juan Guerrero.