Un modelo válido para todos

Canarias no es un territorio homogéneo turísticamente hablando. Puede decirse que cada isla es un mundo, con sus peculiaridades en cuanto a perfiles de visitantes, a su capacidad adquisitiva y a su origen, pero también en cuanto a su planta alojativa. Aunque también es cierto que las similitudes son muchas y el reto, único para todo el Archipiélago.

De las llamadas 'islas turísticas', Lanzarote siempre se ha caracterizado por una mayor sensibilidad social frente a la masificación. Ahora las movilizaciones han mutado sobre todo a Tenerife, mientras la tierra de César Manrique le gana la delantera al resto en ingresar más con menos turistas. El sueño a futuro que se ha marcado el Gobierno de Canarias.

Hay que analizar bien qué sucede en cada destino insular, y sobre todo por qué. Hay que mirar a los orígenes cuando éramos un erial económico sin turismo. Y, sobre todo, hay que consensuar un nuevo discurso sobre qué turismo queremos, válido tanto para el Gobierno y el propio sector como para los ciudadanos.