"La violencia machista es muy sutil, te atrapa; me intenté suicidar"
María José Ferrero cuenta el crudo relato que padeció durante años con su agresor que fue de menos a más hasta intentar quitarse la vida
"La violencia machista es muy sutil, te atrapa; me intenté suicidar"
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Las Palmas de Gran Canaria
María José Ferrero consiguió salir de la espiral de maltrato en la que se encontraba. Ahora su testimonio sirve de ejemplo del largo rastro de consecuencias de la violencia de su maltratador. "Me partió un palo en la pierna y también me envió a la unidad de cuidados intensivos con cuatro cosillas rotas a punto de perforarme el pulmón", dijo Ferrero quien añadió que "me encerró en casa sin agua ni comida porque todo estaba en el restaurante sin agua ni comida, además de faltas de respeto que te hacen pequeñita".
El valor que ahora tiene María José para contar en los institutos su experiencia y a través de un libro, Superando las sombras para abrazar la vida, lo reunió después de "un camino difícil que tuve que recorrer sola". De hecho, aunque ahora dice que ha perdonado a su familia, recuerda cómo le dijeron que "tenía que ir a Cáritas a recoger comida" cuando quiso volver a casa, en León. "Tengo unos amigos espectaculares que jamás creí que alguien que no tuviera mi sangre hiciera tanto por mi".
"Cuando empecé a reconstruirme, lo tuve que hacer sola. Con esta persona creo que no me quedó nada por desestructurar en mi vida", lamentó María José durante una entrevista en Hoy por Hoy Las Palmas. "Jamás había tenido problemas con el alcohol" como hasta entonces.
En todo este tortuoso camino de la recuperación, María José reconoce que hay una fecha que marcó un punto de inflexión: el tres de febrero. "Ese fue el último día que me dio una paliza. Venía desde las Navidades pensando en que tenía que hacerlo. Esperé a que se durmiera. En cuanto lo escuché roncando, salí por la puerta y la policía que tenía asignada en aquél momento me acompañó. Si no, me habría dado la vuelta. Me faltaba el valor".
Después de montar un restaurante y endeudarse, las cadenas de María José fueron aún más complejas de desenredar. "Un ayuda de 480 euros no te libra de todo. Hay que luchar contra el sistema y es muy difícil reconstruir nuestras vidas cuando tenemos deudas porque hay que luchar contra el sistema; te dicen que te dan ayudas, pero no cuando tenemos deudas".
Movilizaciones contra las violencias machistas
"Contra las violencias machistas, haz tu parte" es el lema con el que la plataforma feminista de Gran Canaria recorrerá las calles de la capital. Partirán a las siete de la tarde desde la Plaza Rafael O'shanahan para terminar en el Parque San Telmo. Allí leerán el tradicional manifiesto y se hará entrega de los premios y antipremios de igualdad y derechos de las mujeres. La Plataforma quiere evitar que toda la presión judicial recaiga sobre la víctima y que queden en el tintero casos como el del policía condenado por violencia machista en Agaete y otro ocurrido con una trabajadora en la Consejería de Bienestar Social. "Las administraciones deben priorizar la lucha contra la violencia y la atención a las víctimas y que todos seamos conscientes de la situación y cortemos de raíz la falta de respeto, los chistes y las situaciones violentas", reflexiona la integrante de la Plataforma Feminista de Gran Canaria, Nayra Marrero.
Las consignas volverán a resonar por todo el país durante esta tarde. También aquí en Canarias, que es la comunidad autónoma que tiene la tercera tasa de víctimas más alta de España. Los Servicios de Emergencia en Canarias recibe 50 llamadas de auxilio al día por violencia machista. Desde que hay registros, desde el año 2003, más de cien mujeres han muerto en las islas por esta lacra y ocho niños han muerto en el Archipiélago por la violencia vicaria, porque sus padres los han utilizado como arma arrojadiza contra sus madres.
"Las faltas de respeto que hemos normalizado del tío Juan, del vecino y sus gritos y, si estamos poniendo el freno, antes de que eso termine en una situación mucho peor. No es decirle a la víctima que salga de ahí o no deberías aguantarlo, sino decirle al agresor 'esto no te lo permito'", dijo Marrero.