Más abusos en centros de menores
La mirada de Marta Cantero: Más abusos en centros de menores
A menudo, demasiado a menudo, salta una denuncia por hechos que ocurren en algunos centros de menores migrantes.
A veces son incidencias por inadecuadas instalaciones o servicios; pero otras, quejas graves sobre la atención denigrante de esos niños y niñas por parte de algunos monitores.
En ocasiones, quien denuncia es un trabajador desde el anonimato; en otras, los propios migrantes encuentran la manera de dar el paso.
La última denuncia, sin embargo, se ha producido desde el colegio al que acuden los menores. Y ahí, en ese no mirar para otro lado, está la clave para evitar estos fallos del sistema, que esconden en ocasiones flagrantes delitos.
Normalmente son pocos los abusadores que aprovechan su posición dominante como cuidadares para tratar como animales a personas. Pero estos garbanzos negros no podrían actuar sin la complicidad de la dirección de cada centro. Este lo gestiona la Asociación Felices con Narices. Seguro que hacen una labor maravillosa en general y la mayoría son gente sensible. Pero en los casos denunciados son tan responsables como el monitor que los insulta a diario.
Tanto el Gobierno de Canarias como la Fiscalía están ya inspeccionando. Seguramente la denuncia quedará en nada, por las dificultades que dicen encontrar para investigar. Y así volvemos al bucle inicial de mantener el acoso con toda impunidad.
Así que de "felices", nada de nada. Más bien todo lo contrario.