El misterioso insecto descubierto en las profundidades de las cuevas de Canarias

Santa Cruz de La Palma

Es el descubrimiento del que todo el mundo habla en Canarias, el hallazgo de cuatro nuevas especies de extremófilos que habitan en las profundidades de la Tierra en Canarias. En concreto, la revista Subterranean Biology acaba de publicar un artículo en el que detalla la aparición de estas cuatro especies de nombre impronunciable en La Palma. Cixius palmirandus de La Palma, Cixius theseus y Meenoplus skotinophilus de El Hierro, y Tachycixius gomerobscurus de La Gomera. Se trata de un hallazgo singular de especies que se suman a las setenta que se han descubierto en todo el mundo, son chicharritas adaptadas a la vida subterránea, viviendo casi sin luz y en condiciones extremas. Hasta la fecha, y gracias a este descubrimiento, Canarias se ha convertido en la región de todo el planeta con mayor concentración de homópteros con este tipo de formas de vida.

Descubiertas gracias a trampas subterráneas

Las fotografías distribuidas fueron tomadas por el investigador Pedro Oromí, que junto a su compañero Heriberto López iniciaron esta apasionante investigación que les ha permitido descubrir cuatro nuevas especies inéditas, totalmente desconocidas hasta el momento. Juntos idearon una especie de trampa de caída, ideada para estudiar el medio subterráneo. Lo hicieron a partir de modelos previos que fueron modificando y mejorar hasta lograr su propio prototipo, publicado en 2010 y que ha resultado todo un éxito, no solo en Canarias, sino en distintos lugares del mundo.

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El hecho de que Canarias sea un territorio volcánico lo hace especialmente interesante para el descubrimiento de este tipo de animales que habitan en las profundidades de las cavidades pétreas configuradas por las distintas erupciones volcánicas. Los tubos del volcán de Tajogaite, la erupción del año 2021, siguen estando a temperaturas superiores a los doscientos grados que resultan incompatibles con la vida. No obstante, con el paso del tiempo y el enfriamiento de las cavidades volcánicas, estos insectos desarrollan su vida en el interior de ellas.

Cómo son estos insectos

Las especies Cixius palmirandus y Meenoplus skotinophilus fueron descubiertas en la Cueva Honda de Miranda en La Palma y en el tubo volcánico de Guinea, en El Hierro, que no había sido investigado hasta la fecha. Estos animales son muy sensibles a la contaminación humana y la tendencia es que desaparezcan cuando su delicado medio es intervenido o perturbado por el ser humano. Son pequeños insectos que pertenecen al grupo de homópteros, que viven en plantas, arbustos y árboles. Además, se alimentan de la savia que succionan en tejidos vegetales a través de la boca, dotada de un pequeño estilete. Por lo general, las presentes en Canarias se dividen en dos grupos: cíxidos y meenóplidos. Viven en redes y grietas en el subsuelo, en cuevas volcánicas y en zonas muy aisladas. Los que viven en zonas más profundas también se alimentan de sabia, pero de las raíces que alcanzan el subsuelo donde viven. Al vivir en zonas casi sin luz, son ciegas o sus ojos están muy reducidos, y su pigmentación ha desaparecido hasta convertirse en seres blancos y pequeños.

Investigación internacional

El trabajo ha sido liderado por Hannelore Hoch, del Museo de Ciencias Naturales de Berlín, en colaboración con investigadores de Canarias y de Madeira. El equipo científico canario está compuesto por Heriberto López, del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología del CSIC (IPNA-CSIC), Pedro Oromí, de la Universidad de La Laguna (ULL), y Manuel Naranjo, del grupo de entomología Melansis. Por parte de la Universidad de Madeira ha participado Dora Aguín, especialista en este grupo de insectos.