Efectos mariposa

El clima enrarecido que se respira por las graves decisiones geopolíticas que se están tomando, está ya contagiando a la economía. Y si la sensación de vulnerabilidad contagia a los inversores, se van a producir efectos mariposas que difícilmente no impactarán en nuestra principal actividad económica. Y no solo porque el dinero sea muy cobarde, como sostiene el dicho bursátil, sino porque la principal contracción que asumen las economías domésticas cuando se asustan es dejar de viajar.

En esta Europa irreconocible, cualquier cosa puede pasar, y la extrema dependencia de Canarias del exterior no ayuda en nada. Así que más les valiera a todos los agentes que integran el turismo alcanzar acuerdos a futuro antes que seguir confrontándose en tiempo de bonanza. Porque igual que no hay mal que cien años dure, tampoco los tiempos de vacas gordas son imperecederos.