Caída de redes móviles y de datos deja a pequeños comercios de Canarias sin poder cobrar con tarjeta

Las Palmas de Gran Canaria

Aunque el apagón eléctrico a nivel nacional finalmente no afectó al suministro en Canarias, la caída de las redes móviles y de datos sí dejó fuera de servicio numerosos Terminales de Punto de Venta (TPV) durante las horas de la tarde de este lunes. La situación generó inconvenientes en pequeños comercios, bares y cafeterías, que no pudieron realizar cobros con tarjeta ni emitir facturas electrónicas.

Desde primeras horas de la tarde, muchos establecimientos comenzaron a reportar problemas de conectividad que afectaban a los dispositivos vinculados a redes móviles, tanto para TPV como para aplicaciones de gestión. “Se cayó el servidor nuestro, no podíamos facturar ni nada hasta las siete de la tarde, más o menos. Tuvimos que usar el bolígrafo y la calculadora. Ya hoy sí estamos operando con normalidad”, explica Antonio González, encargado de una ferretería en Las Palmas de Gran Canaria.

Las incidencias también alcanzaron a clientes que intentaban realizar pagos con sus móviles o consultar sus cuentas bancarias. “Tuvimos que funcionar con efectivo durante toda la tarde, ya que no teníamos cobertura ni en las plataformas ni cobrar con datáfono. Si venía alguien sin efectivo no podíamos atenderles", cuenta Adriana Pérez, la responsable de una cafetería. La misma situación que le ocurrió al negocio de Javier Díaz, puesto que "al final dependemos de península. No pudimos trabajar con las plataformas de reparto a domicilio. Hemos tenido que trabajar a medio gas".

La caída se atribuye a la saturación y el colapso parcial de infraestructuras de telecomunicaciones que, aunque no provocaron un apagón general, sí afectaron al tráfico de datos móviles en todo el Archipiélago. Operadoras como Movistar, Vodafone y Orange reconocieron problemas intermitentes durante la jornada y trabajaron para restablecer el servicio lo antes posible.

"Tuvimos incidencias a intervalos, dependiendo de la compañía o si era por redes móviles o por internet, pero la gente lo entendía a pesar de que tuvimos guardia nocturna. Desde las doce de la noche volvió todo a la normalidad", explica Álvaro López, encargado de una conocida farmacia.

El incidente ha vuelto a poner sobre la mesa la dependencia digital del comercio y la necesidad de disponer de alternativas o sistemas de respaldo. Muchos comerciantes se vieron obligados a buscar soluciones improvisadas. En algunos casos, los clientes tuvieron que abandonar las compras al no poder pagar.