Dos playas de La Graciosa, bandera negra de Ecologistas en Acción por contaminación
Denuncian la afluencia de turistas, las actividades del puerto y el atraque de embarcaciones turísticas en la playa de Caleta del Sebo y Playa Francesa como algunos de los motivos

Dos playas de La Graciosa, bandera negra de Ecologistas en Acción por contaminación
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Arrecife
Ecologistas en Acción (EEA) ha presentado su informe ‘Banderas negras 2025’, con el que saca a la luz los casos más significativos de contaminación y mala gestión ambiental de las costas del Estado español.
En esta ocasión, dos banderas han ido a parar a la isla de La Graciosa y en concreto, a la playa de Caleta del Sebo y Playa Francesa, en ambos casos por contaminación.
El colectivo recuerda que la playa de Caleta del Sebo es el lugar tradicional de baño de la población asentada en la localidad y que en su extremo norte, se sitúa el muelle (convertido actualmente en puerto) donde atracan y transitan barcos de pasaje, de empresas privadas y de personas particulares.
Añade que dispone de zona de atraque, varadero, pantalanes y barcos vivienda y señala que la afluencia de embarcaciones, vertidos y actividades contaminan la playa.
En cuanto a Playa Francesa, a 2.700 metros de la anterior, EEA explica que acuden barcos con turistas que generan ruido, dan de comer a las gaviotas y a los peces y dejan excrementos y papel higiénico.

Acceso a Playa Francesa, en La Graciosa. / Ecologistas En Acción

Acceso a Playa Francesa, en La Graciosa. / Ecologistas En Acción
La asociación ecologista recuerda que Caleta del Sebo es un asentamiento pesquero desde mediados del siglo XIX, ubicado en la isla La Graciosa, de 27 km² integrada en el Archipiélago Chinijo, en la Reserva Natural Integral de Los Islotes, y el Parque Natural del Archipiélago Chinijo.
Los ecologistas explican que en la actualidad, la visitan diariamente cientos de turistas que desembarcan en el muelle anexo a la playa, que a su vez acoge a una significativa cifra de embarcaciones, algunas de las cuales sirven de viviendas.
Igualmente, añaden, la playa es el escenario donde se desarrollan diversas actividades de restauración, ocio, culturales, deportivas y festivas.
EEA explica que aunque la población insular permanente es de 720 personas, puntualmente en verano, superan las 30.000, y al año recibe más de 300.000 visitas alojadas en pensiones y en los múltiples apartamentos que se ofertan.
A 2.700 metros se ubica Playa Francesa, que igualmente "soporta una significativa afluencia de embarcaciones, principalmente las que trasladan a turistas para pasar el día". Añaden que en las embarcaciones, se celebran fiestas, comidas, baños, juegos y concursos con música con elevados decibelios, actividades que generan ruidos, afluencia de personas, residuos que quedan olvidados en la arena, entre la vegetación y en el agua. Recuerdan que a la Playa Francesa ya se le concedió en 2023 una bandera negra.
Motivos de las banderas negras 2025
Respecto a los motivos de las nuevas banderas negras, explican que se debe a que "el pésimo estado de conservación de la playa de Caleta del Sebo demuestra la mala gestión de sus usos, de las actividades que se desarrollan y de la escasa vigilancia a las embarcaciones que frecuentan el puerto". A su vez, Playa Francesa "continúa sin alcanzar un estado de conservación óptimo".
EEA señala que a pesar de que la longitud de la Playa de Caleta del Sebo no supera los 130 metros, diariamente se instala mobiliario de restaurantes donde se bebe y fuma, se alquila y transita en bicicletas y kayak, se toma el sol, se utilizan las tradicionales carretillas para el transporte.
Además, se celebran eventos deportivos con alta afluencia de participantes y público que tienen una alta difusión, como “Travesía a Nado” y “Desafío Octava Isla”, y fiestas, siendo la más relevante las del Carmen, a la que asisten más de 30.000 personas.
A estas situaciones, suman las propias consecuencias del puerto, en el que atracan y circulan barcos de pesca, de pasaje, de recreo gestionados por empresas que trasladan turistas y embarcaciones privadas, algunas amarradas de forma permanente que son viviendas.
El colectivo ecologista considera que las actividades que se desarrollan en tierra y en el mar, el tránsito de embarcaciones ligado a la generación de residuos sólidos y líquidos que se depositan en el fondo marino y en la superficie terrestre, crean un tapiz negro que desprende olores desagradables.
Señalan que Playa Francesa es el destino de multitud de embarcaciones de ocio que celebran fiestas, juegos y concursos con música, bocinas y pitos que se oyen desde la lejanía, generando una significativa contaminación acústica.
Igualmente se celebran comidas en las embarcaciones desde las que se ofrecen a las aves -gaviotas fundamentalmente- trozos de pollo para interactuar y que, las aves, en el intento de atraparlos chocan con el casco de las embarcaciones; mientras, el arroz sobrante lo vierten al mar para alimento de los peces.
Aunque en la actualidad no se permite el desembarco, quien lo hace, "deposita sus excrementos, colillas, botellas plásticas y latas de bebidas entre los matos que crecen". Añade que la playa es igualmente frecuentada por turistas que se acercan caminando o utilizando los servicios de los jeeps-taxis que recorren la isla a gran velocidad para satisfacer la demanda.
Soluciones o propuestas de mejora
Para Playa Caleta del Sebo, Ecologistas En Acción propone la regularización de los usos y de las actividades que se desarrollan y seguimiento de su cumplimiento, un mayor control e inspección de vertidos desde las embarcaciones y análisis regulares del estado de la playa (arena y agua).
También reclaman la limpieza profunda de los actuales depósitos de residuos, un mayor seguimiento durante el desarrollo de las actividades y límites en los grandes eventos deportivos y fiesta de la patrona (Virgen del Carmen) y una correcta gestión de los residuos generados.
Para Playa Francesa, plantean la regularización de los usos y actividades a desarrollar en la playa, la prohibición de interactuar con la fauna marina, una mayor frecuencia de los servicios de limpieza y estrechar la observación para garantizar el cumplimiento de las normativas.




