La anécdota de Manuel Carmena sobre el divorcio en La Palma cuando ejercía como jueza en la isla

Santa Cruz de La Palma

Manuela Carmena se estrenó como Jueza en la isla de La Palma en los años ochenta. Tras haber puesto en marcha el primer despacho de abogados laboralistas de todo el país a finales de los sesenta, Carmena tomó rumbo a Canarias. Se convirtió en Jueza y su primer destino fue Santa Cruz de La Palma, con algo más de treinta años. "En algún sector de jueces, por ejemplo, no les habrá gustado mucho mi llegada. En la Audiencia de Tenerife había cierta expectación cuando iba ‘la comunista de La Palma’, pero conmigo han procurado estar encantadores”, confesó Manuela Carmena en una entrevista en El País en aquellos años. En junio de 1981 se aprobó el divorcio en España, y con ello, los jueces tuvieron que hacer frente a un escenario totalmente inédito.

¿Por qué para casarme no necesito un abogado y para divorciarme sí?

La Palma era entonces un entorno rural y muy pequeño. En su despacho, Carmena vivió todo tipo de situaciones. "Entró un señor, porque yo siempre tenía la puerta abierta, y me dijo: oiga, yo no veo claro eso. ¿Para casarme no me pidieron ningún abogado y ahora para separarme me piden un abogado?", le espetó a la Jueza el paisano. "Me hacía mucha gracia porque efectivamente fue una conmoción, y yo creo que afortunadamente la judicatura respondió, al principio con mucha vacilación", explicó Carmena en RTVE. "En aquel tiempo el Tribunal Constitucional fue determinante", añadió.

Manuela Carmena inició su carrera judicial en 1980, tomando posesión como Juez de Primera Instancia e Instrucción en ese mismo año en Santa Cruz de La Palma, ascendiendo a Magistrada en 1983. Continúa su carrera con el nombramiento de Juez de Vigilancia Penitenciaria número uno de Madrid hasta 1993, tomando el cargo de Decana de los Juzgados de la capital de España hasta 1996, año en el cual entra a formar parte, con cargo de vocal, en el Consejo General del Poder Judicial.