Ryanair recibió dinero público para operar en Canarias y ahora se marcha sin miramientos

Santa Cruz de Tenerife

Eduardo Pereira negoció el primer contrato con Ryanair en Canarias en el año 2006. La compañía empezó a operar en Tenerife y Fuerteventura en un momento de crisis económica que afectaba de lleno al turismo. La intención de Canarias era abrir rutas que no estuvieran operando, o que no estuvieran bien cubiertas en el Archipiélago, con la idea de que el apoyo económico público no fuera sostenido en el tiempo. En ese contexto Ryanair recibió dinero público del Gobierno de Canarias y de los patronatos de turismo para que iniciara las operaciones con las islas. Irónicamente, hoy castiga al Archipiélago alegando no estar dispuesto a pagar unas tasas para mantener el sistema público del que se benefició hace casi veinte años. "Allí empezó todo el fenómeno Ryanair, en los vuelos más largos que empezaron a operar con Canarias", explica Pereira.

Ryanair recibió dinero público de los tinerfeños

El exdirector del aeropuerto de Fuerteventura ha explicado cómo se produjo aquella negociación en plena crisis económica. "Es cierto que se les pagó en 2006 para llegar a Canarias, tanto Tenerife, como Fuerteventura como el Gobierno de Canarias. Se hizo porque en ese momento volaban a rutas de más de dos horas y había que romper aquella tendencia, era un momento de crisis económica muy complicado", justifica. "Esas ayudas están bien y las permite la Comisión Europea siempre y cuando sirvan para este tipo de ocasiones, para apoyar a crear nuevas rutas, apoyar a aeropuertos que están infrautilizados", añade.

Ryanair ha endurecido su política a lo largo de los años, pero que siempre han sido un hueso duro de roer en las negociaciones. Ahora, con una estrategia mucho más agresiva, abandona Tenerife Norte sin miramientos. "Tienen una forma muy especial de negociar, nosotros lo sufrimos en nuestras carnes. Tiene un gran poder de negociación, una estrategia muy dura, muy fuerte, también a nivel comunicativo", añade Pereira.

Los verdaderos motivos de la marcha de Ryanair

Eduardo Pereira cree que detrás del recorte de plazas se encuentra tan solo el deseo de trasladar parte de su operativa a mercados más rentables. "En Gran Canaria, Tenerife Sur, Fuerteventura o Lanzarote no ha tocado nada. Solo ha tocado algunas líneas que probablemente le resultan poco rentables y moverá esos aviones a otras líneas más rentables", explica el ex empleado de AENA.

Ryanair es una compañía muy grande, probablemente la mayor operadora española. "El año pasado llegó a mover cerca de treinta y dos millones de pasajeros desde España. Ahora tiene un problema de suministro de aeronaves, solo vuelan con el Boing 737 y están moviendo sus líneas hacia las rutas más rentables", explica.

La subida de tasas es una excusa, porque el verdadero problema de Ryanair es el suministro de aviones. "Este movimiento coincide con la subida de las tasas por parte de AENA, y esto es la tormenta perfecta para anunciar que se va por ese motivo. AENA sube las tasas en todos los aeropuertos, pero Ryanair solo se va de unos pocos aeropuertos", explica Pereira.

Canarias es una mina de oro para todos

Canarias tiene los aeropuertos más rentables de España, sin embargo, ni pincha ni corta en las decisiones de AENA. El estado está negociando la cogestión de los aeropuertos con Cataluña, algo que Canarias espera desde hace décadas sin resultados. Pereira considera que sería justo que Canarias pudiera tener voz. "Las regiones tienen que tener voz, opinar y decidir", explica. "Existen unas figuras sin mucho éxito que son los comités de coordinación aeroportuaria", concluye.

La quinta libertad es un viejo anhelo del Archipiélago. "Este modelo de gestión aeroportuaria, que data de 2014, debería revisarse para que las regiones tuvieran mucha más capacidad de decisión, porque al fin y al cabo son las que se ven más afectadas por este tipo de decisiones", reconoce Pereira. Esta necesidad ha sido sistemáticamente desoída por todos los gobierno del Estado e insuficientemente explicada por los responsables políticos canarios en Madrid.