Gente corriente

Santa Cruz de Tenerife
Los grupos parlamentarios que sustentan el Gobierno de Canarias ultiman este mes la ley con la quieren regular el alquiler vacacional en las Islas. Un sector que necesita con urgencia una ordenación, pero un sector al que se está criminalizando (según las asociaciones del sector) de manera injusta y torticera.
Invertir en una vivienda y ponerla en alquiler vacacional no es, para muchas familias, un negocio especulativo, sino una tabla de salvación.
Sobre todo, cuando los tipos de interés están por los suelos... Cuando pagas un dineral por un hijo que está estudiando fuera... O cuando contratas a alguien para que le cambie el pañal a un padre o una madre dependiente porque conseguir una plaza pública en una residencia es una quimera.
En este contexto, alquilar una casa a turistas deja de ser un lujo: es supervivencia.
El alquiler vacacional nació en Estados Unidos, a mediados de los 90, con plataformas digitales que poco después llegaron a Europa. Y fue una revolución, porque permitió a las clases medias acceder a un dinero extra.
En Canarias (con 18 millones de turistas al año) la vivienda vacacional supone para miles de familias la posibilidad de cuadrar las cuentas. Y es difícil pensar que se le hace daño al sector hotelero cuando resulta que siguen batiendo récords de ingresos.
Lo incomprensible es que desde esos gigantes se plantee esa convivencia como una lucha, en lugar de abrir un espacio al diálogo y a las sinergias.
Porque no hablamos de David contra Goliat: sino de gente corriente, que quiere vivir en paz.
La pregunta que hay que poner sobre la mesa y que sigue sin respuesta es ¿por qué tantas personas prefieren abrir la puerta de su casa a un extranjero en lugar de alquilarle esa misma vivienda a una familia de aquí?
La respuesta es evidente: falta de garantías jurídicas; miedo a los impagos y pánico a las ‘okupaciones’.
Con seguridad y reglas claras, seguro que muchos propietarios volverían al mercado tradicional.
Así que la solución no está en prohibir ni en enfrentar: la solución está en convivir.
No es tan difícil sellar la paz, donde ahora mismo hay una guerra...
El turismo, en estas Islas, no puede ser jamás una trinchera.

Miguel Ángel Daswani
Conductor de 'Hoy por Hoy La Portada' y 'Hoy por Hoy Tenerife'.




