La justicia plantea medidas únicas en España sobre la infancia: "Hay que reducir el trauma que les supone pisar un juzgado"

Las Palmas de Gran Canaria

Si hay algo de lo que Canarias se debe sentir orgullosa es del trato judicial a los menores de edad. De hecho, "el Consejo de Europa reconoce el modelo canario y somos un ejemplo a nivel nacional y europeo". Así lo ha señalado este martes, en Hoy por Hoy Canarias, Tomás Martín, titular del Juzgado contra la Violencia a la Infancia y la Adolescencia, quien ha señalado que "lo que falta en Canarias es expandir este sistema y ir al vaivén de determinadas cuestiones que son puntuales, pero que se constituyen como obstáculos".

En cuánto a esos obstáculos, Martín señala la necesidad de que "arranque el Palacio de Justicia en Santa Cruz de Tenerife y que la Administración culmine la mejora de personal en los Institutos de Medicina Legal". Para Martín, "son pequeños pasos, pero que tienen que ser consecutivos para lograr esa mejora".

El Juzgado contra la Violencia a la Infancia y la Adolescencia está triplicando el número de casos, pasando de 375 en 2023 a los 1.200 con los que se prevé que se cerrará el año. El incremento no se debe, según el juez, a una mayor violencia sino a que "estamos atacando la cifra oculta que no llegábamos a alcanzar antes, quedando en ámbitos más privados, lo que ya no pasa".

Canarias, a la vanguardia

El magistrado destaca como uno de los factores claves la puesta en marcha de su juzgado y el protocolo interinstitucional que crea un protocolo de protección a los menores tanto en los tribunales como en el Instituto de Medicina Legal, y que aumenta con la creación de la Casa de la Infancia, que servirá para reducir el trauma que supone para los menores pisar un juzgado y ayudará a mejorar su paso por este proceso.

La primera de estas Casas de la Infancia, que se espera que estén en todas las islas en un futuro cercano, se inauguró la semana pasada en Gran Canaria, justo encima del Instituto de Medicina Legal.

Esta Casa de la Infancia busca adaptar los espacios judiciales a las necesidades de las víctimas menores de edad con el objetivo de evitar el contacto entre ellas y el procesado en cualquier fase del procedimiento y que tratará de evitar que los menores de edad tengan que prestar declaración en el plenario. De hecho, en caso de hacerlo, lo harán desde una sala habilitada en esta Casa, con conexión en directo con el Juzgado.

Esta Casa de la Infancia busca simplificar el proceso y que la parte judicial deje de ser revictimizante y permita que el menor pueda seguir su proceso de recuperación de manera correcta.

Tipos de violencia

En cuanto al tipo de violencia que sufren los menores, Martín señala que lo digital "no es una violencia por si misma sino el acompañamiento de otros delitos, como los delitos contra la libertad sexual, que es la que más se registra". La violencia intrafamiliar también destaca, aunque en muchos casos están ligadas a otras circunstancias, y aumentan los delitos contra la intimidad.

Tomás Martín ve positivo crear una figura para prevenir la violencia en actividades deportivas entre menores, si se pueden crear protocolos que eviten esos casos.