La Fundación César Manrique, contra los carteles publicitarios en el exterior de las terminales aeroportuarias

Arrecife

La Fundación César Manrique (FCM) ha manifestado su rechazo a la proliferación de grandes anuncios publicitarios en la zona exterior de llegadas y los accesos al Aeropuerto César Manrique-Lanzarote y solicita la retirada.

Desde la FCM, se afirma que ya le fue trasladada la petición a la Dirección del Aeropuerto el pasado mes de julio, sin recibir respuesta ni revertirse la situación hasta el momento. Añade que se trata de un malestar compartido con particulares y sectores de la población lanzaroteña, que se han dirigido en diversas ocasiones a la fundación para trasladar sus quejas al respecto.

La Fundación César Manrique considera incomprensible la colocación de esta publicidad en el contexto de una isla como Lanzarote, con una tradición de más de medio siglo apartada de la contaminación visual que generan las vallas publicitarias y grandes anuncios, concretamente, desde el año 1967, con la aprobación del Reglamento de Defensa del Paisaje y de la Arquitectura Popular Lanzaroteña, auspiciado por César Manrique y aprobado por el Cabildo de Lanzarote.

Asegura la FCM que esta tradición, aunque de forma puntual pero creciente, se ve quebrantada en distintos puntos de la isla con la colocación de anuncios publicitarios, particularmente en Arrecife.

Asegura la entidad que normas de este tipo, como el pionero Reglamento del Cabildo, que velan por el interés general de la isla y del patrimonio cultural y paisajístico, sin atender a intereses económicos o publicitarios de empresas particulares, también se integraron en otras figuras de planeamiento como el Plan Insular, hecho que siempre fue motivo de satisfacción para César Manrique como expresó públicamente en distintos momentos.

A modo de ejemplo, la FCM se remonta al 3 de enero de 1976 cuando César declaraba en el periódico La Provincia: “En Lanzarote se han realizado esfuerzos increíbles para proteger la isla y elevar su nivel de vida, evitando por todos los medios el deterioro de su paisaje, con la prohibición de horrendos anuncios publicitarios, y que posiblemente ha sido Lanzarote el único lugar del mundo donde se ha podido conseguir este milagro. Se ha cuidado al máximo su tradición de arquitectura popular y su agricultura. Se ha protegido de la chabacanería y se han visto claros los resultados obtenidos, con un éxito de prestigio mundial”.

Añade que esa satisfacción del artista conejero también la han sentido como propia muchos ciudadanos de Lanzarote, "orgullosos de la singularidad de la isla en este sentido, como reconocen nuestros visitantes, convirtiéndose en seña de identidad moderna de la isla".

Para la FCM resulta inexplicable que el aeropuerto que lleva el nombre de César Manrique, "cuyas dependencias exteriores, en general, merecerían un cuidado más esmerado y que es la puerta de entrada a Lanzarote, primera impresión, por tanto, para los turistas que la visitan", permita y promueva la colocación de publicidad en el exterior de sus instalaciones, contraviniendo gravemente el estilo y la voluntad de César Manrique y desvirtuando la marca Lanzarote.

La Fundación César Manrique insta al Aeropuerto César Manrique-Lanzarote a que actúe con ejemplaridad, reconsidere la solicitud y subsane, cuanto antes, "este desafortunado error de planteamiento".