Jéssica de León defiende la actuación en Los Gigantes y aboga por reforzar la comunicación de alertas

Las Palmas de Gran Canaria

La consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Jessica de León, analizó este martes los principales desafíos del sector en una entrevista en Hoy por Hoy Canarias, tras un puente de diciembre marcado por una ocupación cercana al 85% y casi 5.700 vuelos operados en el archipiélago. Un periodo intenso para un destino que continúa moviéndose en cifras históricas, mientras afronta tensiones como la saturación aérea, los problemas de seguridad en la costa, con cinco muertos en el mar, o el debate sobre el alquiler vacacional.

De León comenzó valorando la tragedia ocurrida en Los Gigantes, donde cuatro turistas perdieron la vida durante el puente. A estos, se sumó este lunes otro en Lanzarote. La consejera defendió que las autoridades locales habían actuado correctamente en el charco de Isla Cangrejo, con advertencias instaladas en varios idiomas y la zona debidamente precintada. Lamentó que, pese a ello, haya personas que “siguen saltándose las normas”, por lo que considera imprescindible reforzar la concienciación. "Otra cosa es que no hubiese ningún tipo de señalética y hubiesen entrado a pesar de la mala mar y ahí la reflexión es otra, pero en este caso y yo creo que después de la tragedia de Puerto de la Cruz se ha actuado con absoluta diligencia", aseveró. Explicó que las alertas del 112 ya llegan a hoteles, actividades en la naturaleza, cabildos y patronatos, aunque reconoció que la comunicación siempre es mejorable.

Sobre el balance turístico del puente, la consejera valoró como “muy positiva” la ocupación alcanzada, recordando que Canarias sigue vendiéndose a un precio alto, compitiendo con destinos abiertos y con una capacidad aérea que continúa creciendo un 2%. Según sus previsiones, el archipiélago cerrará el año entre 18,4 o 18,6 millones de visitantes, una cifra que encaja en lo que definió como un proceso de “normalización” tras años de crecimiento. A su juicio, islas como Gran Canaria o Tenerife han empezado a tocar techo en conectividad y planta alojativa, evidenciando que el destino también tiene límites.

La consejera se refirió también al sociobarómetro publicado la semana pasada, que señalaba que un 20% de los canarios considera que hay demasiados turistas. Para De León, la lectura puede hacerse al revés: el 80% cree que el nivel actual es adecuado, lo que refleja que la sociedad “ha interiorizado que la industria turística nos da de comer”. Añadió que la redistribución de la riqueza se produce mediante impuestos y empleo, recordando que el turismo genera unos 1.700 millones de euros en IGIC y sostiene 365.000 empleos directos, llegando al 80% si se suman los indirectos.

La entrevista estuvo marcada por el apoyo que De León ha recibido en los últimos días, después de conocerse que ha sufrido amenazas, insultos e incluso pedradas en su vivienda durante la tramitación de la ley que regulará la vivienda vacacional. La consejera aseguró que lo que más le preocupa es su entorno familiar, que no está acostumbrado a este tipo de situaciones. Agradeció todas las muestras de cariño recibidas y evitó personalizar el debate: “Nunca he querido centrar esto en mí”.

Sobre la futura ley del alquiler vacacional, De León quiso mandar un mensaje de tranquilidad a propietarios y ayuntamientos. Recordó que desde hace dos años insiste en la necesidad de presentar la actividad clasificada, un trámite obligatorio desde el decreto de 2015 y que muchos no realizaron porque recibieron consejos “erróneos”. A partir del próximo año, anunció, se habilitarán oficinas de atención para ayudar en la regularización y para que los propietarios puedan acogerse a las distintas disposiciones transitorias.

En cuanto al control de la afluencia a los espacios naturales, la consejera explicó que se están desarrollando dos proyectos piloto: uno para dotar a los cabildos de herramientas normativas y fiscales que permitan gestionar esos espacios, y otro, digital, que permitirá medir en tiempo real la presión turística en parques y zonas protegidas. Defendió que los flujos pueden controlarse tanto con tasas como sin ellas, poniendo como ejemplo el modelo implantado en las Islas Atlánticas de Galicia.

Por último, De León reiteró su rechazo a un impuesto turístico por pernoctación, al considerar que no se puede dejar exentos a los residentes. Recordó que, según el ISTAC, el 83% de los canarios se opone a pagar por hacer turismo dentro del archipiélago. Sí se mostró favorable a tasas específicas, como las que están estudiando La Laguna o Puerto del Rosario, y que ya funcionan en lugares como Anaga o Masca.

La consejera concluyó defendiendo que el reto de Canarias pasa por mantener la calidad, reforzar la seguridad y evitar “morir de éxito” en un destino que sigue siendo líder, pero que comienza a mostrar los límites de su capacidad.