Aumento de un 19% el número de familias en situación de exclusión residencial atendidas por Cáritas en toda Canarias
La entidad ha acompañado a 1.078 personas en situación de sin hogar afectadas por la pérdida o la falta de acceso a una vivienda digna

Cáritas atiende diariamente a más de 300 personas en sus comedores de Las Palmas de Gran Canaria

Las Palmas de Gran Canaria
La emergencia habitacional se afianza como uno de los principales motores de la exclusión social en Canarias. Así lo advierte el último informe de Acción Social de Cáritas Diocesana de Canarias, correspondiente al primer semestre de 2025, que constata un incremento del 19% en el número de familias atendidas en situación de exclusión residencial.
En el último año, cerca de 300 familias acompañadas por el Área de Vivienda de la entidad han atravesado situaciones graves relacionadas con la imposibilidad de acceder o mantener un hogar digno. A ello se suma el aumento del sinhogarismo: solo en los seis primeros meses de 2025, Cáritas ha acompañado a 1.078 personas sin hogar, un 11% más que en el mismo periodo del año anterior.
El encarecimiento continuado del mercado inmobiliario explica buena parte de este escenario. En los últimos cinco años, el precio de la vivienda ha aumentado un 49% en el Archipiélago, mientras que el alquiler se ha disparado un 54%, superando ya los 1.000 euros mensuales de media en la provincia de Las Palmas. Una subida que no ha ido acompañada de un aumento proporcional de los ingresos y que empuja a muchas familias a una situación límite tras asumir el pago de vivienda y suministros básicos.
“Nos encontramos con hogares que, aun teniendo algún ingreso, quedan por debajo del umbral de la pobreza después de pagar el alquiler. La vivienda se ha convertido en un factor de empobrecimiento”, advierte Caya Suárez, secretaria general de Cáritas Diocesana de Canarias.
La precariedad golpea con especial dureza a las personas migrantes, cuya situación se ve agravada por la ausencia de redes familiares y, en muchos casos, por la irregularidad administrativa. También a las familias con menores: el 41% de los hogares acompañados tiene hijos a cargo y casi una de cada cinco son familias monoparentales. Además, el 61% de los hogares están sostenidos por mujeres y el 65% se encuentra en desempleo.
Aunque la entidad trabaja en ámbitos como la precariedad laboral, las migraciones, las adicciones o la trata y explotación sexual, la dificultad para acceder a una vivienda atraviesa todas estas realidades. “La vivienda aparece de forma transversal en todos nuestros programas y afecta especialmente a mujeres monomarentales, personas migrantes o familias sin apoyos”, subraya Suárez.
Insisten en la necesidad de una respuesta estructural por parte de las administraciones, ya que “sin una política de vivienda sólida y sostenida en el tiempo, cualquier mejora económica queda en papel mojado. Sin un hogar estable no es posible construir proyectos de vida ni avanzar en integración social”, señala la secretaria general.
Con la mirada puesta en la Navidad, Cáritas refuerza su labor de acompañamiento a las personas más vulnerables bajo el lema “vivir con dignidad”. La entidad pondrá en marcha dispositivos especiales en sus comedores sociales para hacer frente al impacto del aumento del coste de la vida, que también afecta directamente a su acción social. El precio medio de un almuerzo ha pasado de 4,96 euros en 2021 a 7 euros en 2025, un incremento del 29,1%.
“Hagamos que tener una vida digna deje de ser cuestión de suerte”, recuerda Cáritas en estas fechas.

Carlos Moreno
Periodista de informativos en la redacción de la Cadena SER en Canarias. La radio es compañía, es inmediatez,...




