'Aquella noche trágica', el relato del incendio de Santander de un niño de 12 años

«Con una cagalera enorme», así recuerda Chencho Cubría Mirapeix la noche del 15 al 16 de febrero de 1941 cuando el incendio de Santander desató una catástrofe que la cambiaría para siempre. Un incendio, azotado por un intenso viento sur, devoró el centro de la ciudad, dejando con ello unas 10.000 personas sin hogar y 120.000 metros cuadrados de ruinas y escombros, donde hasta ese momento se aglutinaba el 90 por ciento de la actividad comercial. En 1947, nuestro protagonista tenía 12 años y en la hojas de un taco Myrga de sobremesa escribió la vivencia de su familia. Este jueves, 18 de mayo, el Ateneo de Santander acoge la presentación del libro que ilustrado por Beatriz Cea ha sido editado por Editorial Fanes gracias al impulso de la historiadora y promotora cultural, Montse Cubría, hija de Chencho. Los 3 nos han acompañado en Hoy por Hoy Cantabria para hablarnos de un libro que es una crónica real de una de las noches más terribles de la ciudad. La impresionante narrativa de Chencho es un relato detallado y conmovedor de cómo él y su familia vivieron el gran incendio de Santander en primera persona. La habilidad literaria de Chencho para describir la intensidad y el horror de lo que vivió es asombrosa. Desde el momento en que su familia se da cuenta de que su casa está en peligro hasta la huida por las calles en llamas, la narrativa de Chencho es intensa y apasionante. La descripción de la desesperación de la gente, la lucha por sobrevivir y la angustia por encontrar refugio son poderosas y conmovedoras. Además, las ilustraciones a todo color, de Beatriz Cea Díaz, añaden un elemento visual impresionante al libro. Su habilidad para capturar la emotividad y la intensidad de la noche trágica son realmente asombrosas. Cada ilustración es una obra de arte por sí misma y, juntas, forman una narrativa visual impactante que complementa perfectamente la narrativa escrita de Chencho. El calendario y la peonza, lo único que Chencho salvó de las llamas, se conservaron como un tesoro en una caja durante casi ocho décadas en un desván, un tesoro que ahora Editorial Fanes saca a la luz en formato album que podrán disfrutar lectores de todas las edades. «Yo no supe que mi padre había escrito este relato hasta 2015 y desde ese momento me propuse editarlo» nos ha contado Montse Cubría. En la presentación del libro que tendrá lugar en el Ateneo de Santander, este jueves, 18 de mayo, el autor estará acompañado por la ilustradora Beatriz Cea, Montserrat Cubría Piris y Adriano Pérez, editor adjunto de Editorial Fanes. Chencho Cubría Mirapeix vino al mundo en Santander en plena Revolución de octubre de 1934, pero su corazón es “pamanisco” de Pámanes. Creció frente al mar en la calle Calderón de la Barca, a muy pocos metros de donde comenzó el incendio de 1941. José María Cubría Mirapeix fue cirujano del Hospital Marqués de Valdecilla durante casi cuatro décadas y es un “manitas” que lo mismo te hace una filigrana de latón que una taracea con un hueso de vaca o un repujado de cuero. Polifacético y tertuliano de pro, es un apasionado de los libros y de todo lo relacionado con el mar, y es un estudioso de los vientos, hasta tal punto que, en otra vida, querría ser “maestro veletero”. Cuando se jubiló, en 2000, fundó la Federación ACANTO que reunió a todas las asociaciones regionales en defensa del patrimonio cultural y natural de Cantabria. Su mayor orgullo es haber recuperado el Dique de Gamazo.

'Aquella noche trágica', el relato del incendio de Santander de un niño de 12 años

En Hoy por Hoy Cantabria charlamos con su autor, Chencho Cubría Mirapeix; su ilustradora, Bea Cea y la promotora de la idea, Montse Cubría

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