La Policía Nacional de Cantabria da claves a los padres para evitar que sus hijos sean victimas de sexting o grooming
Un reciente de Unicef reflejaba que cuatro de cada diez menores habían recibido mensajes de contenido erótico/sexual y un 8% una proposición sexual por parte de un adulto
La Policia Nacional de Cantabria da claves a los padres para evitar que sus hijos sean victimas de sexting o grooming Un reciente de Unicef reflejaba que cuatro de cada diez menores habian recibido mensajes de contenido erótico/sexual y un 8% una propo
05:27
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1687876922575/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Santander
El término "sexting" es un neologismo que significa "recibir, enviar o reenviar mensajes de texto, imágenes o fotografías que presentan un contenido sexual explícito, vía Internet o teléfono celular", mientras que el grooming se produce cuando un adulto trata de engañar a un menor a través de Internet para ganarse su confianza con intención de obtener fotos o vídeos de situaciones sexuales o pornográficas e incluso llegar a chantajearle con ellas. En ocasiones es el paso previo al abuso sexual.
La Policía Nacional de Cantabria ofrece charlas a los alumnos de la región en las que se alerta de los riesgos que hay en internet y especialmene en las redes sociales para los menores. De hecho, las cifras que recogia un estudio de Unicef, elaborado hace un año en colaboración con la Universidad de Santiago de Compostela (USC) y el Consejo General de Colegios de Ingeniería en Informática (CCII), recogia las opiniones de más de 2.300 adolescentes de diez centros de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) de Cantabria.
Las prácticas de sexting y el ciberacoso eran identificadas por los propios adolescentes como los principales riesgos de la tecnología: cuatro de cada diez (41,2%) aseguran haber recibido alguna vez mensajes de contenido erótico/sexual, un 8,4% ha recibido -a través de redes, chats, Internet o videojuegos- una proposición sexual por parte de un adulto, y uno de cada cuatro podría estar sufriendo ciberacoso.
Unifec reflejaba que era necesario tomar medidas para reducir las "preocupantes" cifras de sexting, contacto con desconocidos o posibles casos de grooming , así como abordar el uso problemático de las redes sociales y posibles adicciones a videojuegos.
Nada hace pensar que estas cifras hayan ido a mejor en este último año. Desde la Policía Nacional se ofrecen algunas de las pautas a seguir para evitar que menores sean victimas de depredadores sexuales. Elena Bellota es portavoz de este cuerpo policial en Cantabria y ha explicado en la Cadena SER que existen controles parentales muy efectivos para prevenir estas situaciones.
Explica que al dar un teléfono móvil a nuestro hijos, lo primero que se debe hacer es configurar la privacidad de las redes sociales junto a ellos para que no agreguen a ninguna persona que no conocen, además de explicarles los peligros que existen en las redes sociales, controlar que no compartan imagenes y videos, poner filtros parentales, antivirus y vigilar lo que ven.
Recuerda que hay una edad mínima para que los menores pueda usar las redes sociales y son los 13 o 14 años. Los padres tiene la obligación de controlas con quien están hablado a través de ellas sus hijos y explicarles que el hecho de que alguien les solicite amistad, no quiere decir que esa persona sea un amigo o amiga. Tambien los padres deben concoer las claves de acceso de sus hijos a las redes sociales, explica Bellota.
Añade que los que buscan captar a menores en las redes buscan a aquellos que tienen problemas en casa, que no se llevan bien con sus padres y eso hace más sencillo que una persona se puede hacer pasar por un menor, ganarse la confianza del menor y querer quedar con él, en persona, con el riesgo que algo así, entraña.
Bellota explica que "hay que mirar el móvil de nuestros hijos con ellos y hablarles de las consecuencias que tienen sus actos en la red, explicarles las consecuencias de sus hechos, como por ejemplo las dificultades de eliminar una foto después de haberla subido a una red social y el hecho de que puede verla todo el mundo".
Concluye que los padres no pueden escudarse en que no entienden como funciona la tecnología, deben buscar la manera de saber como utilizar las redes sociales para poder controlar el uso que hacen sus hijos de ellas.