Santander retoma el proyecto del Centro de Baja Exigencia

Santander

El Ayuntamiento de Santander retoma el proyecto del Centro de Baja Exigencia aunque no está decidido el lugar. Lo ha anunciado Zulema Gancedo, la concejala Servicios Sociales, Familia, Salud, Autonomía Personal e Igualdad, en su primera entrevista en Hoy por Hoy Cantabria para dar a conocer las líneas de trabajo de su departamento. La edil ha resaltado que ahora es el momento de retomar este proyecto con "un análisis y un estudio que tenga una visión mas objetiva y que aporte otro punto de vista y otra valoración para darle un empujón, incluso con alguna variación que mejore el proyecto" que fue inicialmente paralizado. Gancedo ha defendido que la vigencia del proyecto y su necesidad es absoluta por eso el inicio de la legislatura es el momento para estudiar cómo ponerlo en marcha. El proyecto había sido anunciado por el anterior concejal del área, Álvaro Lavín, en un programa emitido desde el Centro de Acogida Princesa Letizia.

Toma de contacto

Gancedo, en todo caso, señala que todavía está analizando todos los proyectos de su departamento tras incorporarse al equipo de gobierno el pasado 17 de junio. Enfermera experta en Salud Comunitaria, en Gestión de Servicios Sanitarios y especialista en tabaquismo; con Máster en Gestión y Planificación Sanitaria para directivos de la salud, y en Gestión de la Calidad de Servicios Sanitarios. Fue directora de Enfermería del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla entre 2011 y 2015, donde también ha sido responsable de gestión en distintas áreas asistenciales y de Transporte Sanitario. Recibió el Premio de Investigación ‘Enfermería Valdecilla’ del Idival en 2020. Se incorpora en junio de 2023 al Ayuntamiento de Santander como concejala de Servicios Sociales, Familia, Salud, Autonomía Personal e Igualdad.

Anuncio en marzo y paralización en abril

El anuncio de la puesta en marcha del Centro de Baja Exigencia lo realizaba el anterior concejal de Servicios Sociales, Álvaro Lavín. Un nuevo recurso para 20 personas a través del que se pretende proporcionar servicios básicos a personas sin hogar, para evitar que pernocten en la calle, y mejorar sus condiciones de vida. En ese momento se explicaba que el Centro de Baja Exigencia de Santander se ubicaría en un local de más de 150 metros cuadrados en la calle Enseñanza 6, después de que la Junta de Gobierno Local aprobase la contratación del alquiler del local a Real Automóvil Club de Catalunya (RACC) por un precio de 1.089 euros al mes.

Tal y como se detallaba entonces, el Ayuntamiento tenía prevista la apertura de este nuevo recurso habitacional para 20 personas sin hogar que en la actualidad están durmiendo en la calle ya que, en base a la experiencia acumulada en los últimos años, y en los diferentes programas de atención a estas personas gestionados por el ayuntamiento, como es el caso del Centro Municipal de Acogida princesa Letizia, el Programa de Ola de Frío, el servicio de Emergencias Sociales, o el programa de Educadores de Calle, el promedio de personas que pernoctan en las calles de la ciudad se sitúa en torno a las 20 personas diarias.

Apenas un mes después, a finales de abril y justo un mes antes de las elecciones municipales del 28 de mayo, el propio Lavín anunciaba la "paralización total" del proyecto para crear en la calle Enseñanza un centro de baja exigencia para personas sin hogar.

Lavín hacía ese anuncio en el debate en el último pleno ordinario de la legislatura de una moción de Vox, que pedía no seguir con ese proyecto, que anunció el equipo de gobierno a finales de 2022.

El concejal explicaba que, tras esa moción, y después de hablar con los vecinos de la calle y con la empresa que planteaba ese centro, se va a analizar el proyecto y ahora se ha decidido "parar al cien por cien" la puesta en marcha de ese centro.

El 28 de marzo, Lavín había resaltado la puesta en marcha de ese centro de baja exigencia. Tras la aprobación del proyecto en la Junta de Gobierno Local que conformaban entonces PP y Ciudadanos, el concejal de Servicios Sociales explicó que en ese centro se proporcionará cama para dormir, taquillas para que puedan guardar sus pertenencias las personas sin hogar, baños para el aseo y una zona de descanso y reposición mínima de alimentos y bebida.