El soterramiento de las vías en Torrelavega: un cambio trascendental en la vida de sus vecinos
El ayuntamiento anuncia la construcción de la vía auxiliar que permitirá la integración ferroviaria
El Soterramiento en Torrelavega: Impacto y Detalles de la Construcción de la Vía Auxiliar en el Bulevar Ronda
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SER Torrelavega
Torrelavega está a punto de iniciar un proyecto de gran envergadura que transformará no solo la infraestructura de transporte, sino también la rutina diaria de sus habitantes. El anuncio del ayuntamiento sobre la próxima construcción de una vía auxiliar, que facilitará el soterramiento de las vías que dividen el centro de la ciudad, desviando el tráfico ferroviario por el Bulevar Ronda, ha generado un sinfín de preguntas y expectativas en la comunidad local.
Una solución de futuro
El proyecto tiene previsto su inicio para diciembre o enero y posee un objetivo ambicioso: permitir el soterramiento de las vías ferroviarias en la ciudad sin que este proceso se vea condicionado por la circulación de trenes. Esto representa un paso crucial hacia la modernización y optimización de la red de transporte ferroviario en la región, pero sobre todo, hacia la integración del centro urbano de la capital del Besaya.
No obstante, la noticia ha generado inquietudes entre los usuarios del ferrocarril y la población de Torrelavega en general. ¿Cómo afectará este proceso a sus vidas y a su movilidad cotidiana?
Cambios graduales para los usuarios del tren
Para los usuarios del tren, los cambios no serán inmediatos. Durante el año 2024, mientras se construye la nueva vía auxiliar, el servicio de ferrocarril en la línea Santander-Oviedo se mantendrá igual que en la actualidad. Los verdaderos cambios se producirán en 2025, cuando la nueva vía entre en funcionamiento.
El nuevo trazado ferroviario dejará fuera de servicio la estación de Torrelavega y el apeadero del Bulevar Comercial Altamira. En su lugar, los trenes solo realizarán paradas en la estación de Barreda y el apeadero de Ganzo, lo que obligará a los viajeros a utilizar autobuses u otros medios alternativos para acceder al centro de la ciudad.
Desafíos técnicos y urbanos
La construcción de un apeadero en la propia vía auxiliar, más cercano a la ciudad, ha sido una solicitud frecuente, pero los técnicos de ADIF argumentan que las especificaciones de la vía auxiliar hacen que esta opción sea inviable.
Desde el punto de vista urbanístico, el proyecto generará un impacto visible en la ciudad. La demolición de la acera del Bulevar Ronda paralela al río y la tala de árboles a lo largo de esta área serán notables, aunque se espera que la tala sea menos extensa de lo inicialmente proyectado.
Retos de movilidad y adaptación
El año 2024 se presenta como un período de retos significativos en términos de movilidad en el Arco Norte del Bulevar Ronda, que se extiende desde la Habana Vieja hasta Torres. Las obras de la vía auxiliar requerirán cortes parciales o totales de la circulación, el cierre del acceso a la rotonda de Sniace y la autovía.
Una vez finalizada la obra de la nueva vía, se espera una simplificación de la situación. El Bulevar Ronda conservará sus carriles de circulación, y se pretende mejorar la acera interior, dotándola de mayor amplitud.
Un futuro de transformación
Con la puesta en marcha de la vía auxiliar, el soterramiento ferroviario comenzará a tomar forma, marcando un hito importante en la evolución de Torrelavega como ciudad. Si bien 2024 se presenta como un año de desafíos y adaptaciones, se espera que la transformación realizada se traduzca en un futuro más eficiente y sostenible para la ciudad.