SER Capaces | Rocío Villa: "Me di cuenta de lo que me perdía cuando gracias a los audífonos pude oír"

Santander

Rocío Villa lleva 4 temporadas trabajando como camarera de piso en el Hotel-Restaurante Astuy de Isla. Un trabajo en ocasiones duro, reconoce, que desarrolla con total entrega. Ella empezó a perder audición después de padecer una otitis, pero no fue consciente de cuánto había dejado de oír hasta que después de hacerle una audiometría le dijeron que debía ponerse audífonos. "Entonces, al poder oír plenamente fue consciente de lo que había dejado de escuchar y de que empezaba a tener que leer los labios al no entender con claridad lo que me decían" nos ha explicado.

Junto a ella, su jefe, Emérito Astuy, director del complejo hostelero, que nos ha contado que en su establecimiento no tienen en cuenta si un empleado tiene o no una discapacidad a la hora de contratarlo. "De hecho, yo he conocido hoy que Rocío tiene esa pérdida de audición. Nosotros buscamos trabajadores y trabajadores que desempeñen las labores para las que son contratados", ha remarcado.