La joven presuntamente violada por cuatro hombres en Santander niega que consintiera tener sexo con los acusados
Los cuatro procesados que se encuentran en prisión desde que ocurrieron los hechos, declaran en el juicio que el sexo que tuvieron fue voluntario

SANTANDER, 19/03/2024.- Vista del juicio en la Audiencia de Cantabria a cuatro acusados de una violación en grupo a una joven en Santander, en las fiestas de la Semana Grande de Santander de 2022, para quienes la Fiscalía solicita 30 años de prisión para cada uno de los tres supuestos agresores y 15 años y 6 meses para el cuarto, por cooperador necesario en los hechos, este martes en Santander.-EFE/ Román G. Aguilera / ROMÁN G. AGUILERA (EFE)

Santander
La joven que en julio de 2022 fue violada presuntamente por cuatro hombres en Santander ha declarado a puerta cerrada en el juicio que se celebra en la Audiencia de Cantabria y, según informan a EFE fuentes presentes durante su testimonio, se ha ratificado en su declaración ante el Juzgado y ha asegurado que no consintió ni quiso tener sexo con ellos.
La Audiencia de Cantabria juzga desde este martes a estos hombres, todos en prisión provisional desde el verano de 2022, para quienes la Fiscalía pide una pena, en el caso de tres de ellos, de 30 años de cárcel, y de 15 años y seis meses de prisión para el cuarto procesado al que se considera cooperador necesario.
La acusación particular, por su parte, eleva la petición de pena a 50 años de cárcel para tres y 48 años y seis meses para el cuarto.
Dos de los procesados han contestado a las preguntas de todas las partes personadas en el juicio y los otros dos solo a sus letrados, pero han coincidido en señalar que la chica estaba consciente y sabía lo que hacía, pese a que anteriormente había estado de fiesta y bebido, y que el sexo que tuvieron fue voluntario.
El fiscal ha llamado la atención en algunas contradicciones entre lo declarado hoy en el juicio por alguno de los acusados y sus manifestaciones en instrucción en el Juzgado.
La declaración de la joven ha tenido lugar a puerta cerrada y, según han informado a EFE fuentes que han estado presentes, se ha ratificado en su testimonio previo en el Juzgado y ha señalado que no quería tener sexo con los acusados y que se sintió intimidada.
En su escrito de calificación provisional, la Fiscalía va más allá y apunta que la joven fue "incapaz de impedir" la violación por su inferioridad física y numérica, porque se encontraba en un lugar que no conocía -la casa de uno de los procesados- y porque temía que estos hombres pudieran agredirla si se negaba.
La Fiscalía también sostiene que, tras la agresión sexual, los acusados llevaron a la estación de autobuses a la joven para que fuera a su casa, pero que cuando llegó a su parada no la dejaron bajar del vehículo y fueron a la casa de otro acusado, donde hubo otro intento de agresión, a lo que se opuso.
La joven llamó a su compañera de piso, que ha declarado como testigo y que fue a buscarla a esa casa. Frente al relato de los acusados, ha dicho que la encontró "muy borracha, se tambaleaba y arrastraba las palabras".
Esta amiga la acompañó al hospital y a la Policía para denunciar.




