Revilla aclara sus palabras sobre Begoña Gómez: "No soy ningún machista"
El ex presidente de Cantabria y secretario general del PRC aboga por regular el trabajo de la esposa de los presidentes
Comparecencia de Miguel Ángel Revilla
Santander
El ex presidente de Cantabria y secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, ha abogado este jueves por que exista en España una regulación de la actividad laboral de las esposas de los presidentes del Gobierno.
Revilla ha reaparecido ante los medios de comunicación para aclarar sus palabras de ayer, en las que dijo que "quizás", mientras es mujer del jefe del Gobierno, Begoña Gómez "debiera estar más volcada en acompañar en las atenciones protocolarias a su marido", Pedro Sánchez, lo que levantó las críticas de varios cargos socialistas, entre ellos la ministra de Igualdad, Ana Redondo, que tildó las declaraciones de "machistas e inaceptables".
"No he ido contra las mujeres, he ido contra una situación muy concreta, que es la esposa de un presidente que está en tela de juicio y que quizá, en el futuro, debiera de estar regulado su papel", ha dicho hoy Revilla, antes de recalcar que no es "ningún machista".
El ex presidente cántabro ha reivindicado que el PRC, a iniciativa suya, institucionalizó el Día de la Mujer en Cantabria, cuando "no era tan común como ahora". "El PRC lleva en los genes la defensa de la mujer. Jamás he dejado de asistir a una reivindicación en favor de la mujer, pero estamos hablando de la mujer del presidente del Gobierno de España", ha señalado.
Revilla considera que la pareja del jefe del Gobierno "tiene todo el derecho a trabajar", pero también cree que es "muy complicado mantenerse al margen de cuestiones que pueden inducir a pensar que en esa actividad privada tiene algo que ver la influencia o el ser la esposa del presidente".
"También dije que me parecía que el juez está haciendo una instrucción bastante sospechosa y también dije, para rematar, que no hay que alarmarse por que la esposa de un presidente vaya a sentarse a un banquillo, que eso es normal. Yo lo he estado y muchísima gente, y que cuando se está en política hay que estar a las duras y a las maduras", ha afirmado.
Por ello, Revilla apuesta por que, mientras una mujer sea esposa del presidente, exista "algún tipo de control" sobre su actividad, como en Francia o en Estados Unidos, ha apuntado.
"También dije que no es poco honor y poco trabajo el de acompañar en esa etapa al presidente en los múltiples viajes y atenciones que tiene, porque tener una actividad privada, como la que tiene ella, y que además es una actividad privada que al parecer ha ido creciendo desde que es la esposa del presidente, pues es un tema que suscita cierto recelo en algunos y, sobre todo, que ha dado pie a que los partidos de la oposición entren en esta materia a saco", ha apostillado.
