La Universidad de Cantabria presenta un estudio para descongestionar Julio Hauzeur y La Habana Vieja, accesos clave a Torrelavega

SER Torrelavega

El Ayuntamiento de Torrelavega ha presentado a los grupos municipales los resultados de un estudio de tráfico elaborado por el Departamento de Movilidad Sostenible e Ingeniería Ferroviaria de la Universidad de Cantabria. Este estudio aborda específicamente dos zonas clave de acceso a la ciudad: la Avenida Julio Hauzeur y el puente de Torres en el oeste, así como la rotonda de La Habana Vieja en la entrada norte, cerca de La Inmobiliaria. La concejal de Urbanismo y Movilidad, Jezabel Tazón, detalló los problemas de movilidad y las propuestas de actuación presentadas para mejorar la circulación en ambas áreas.

El estudio analiza en primer lugar la zona de la Avenida Julio Hauzeur y el puente de Torres, una importante entrada al casco urbano desde el oeste, que concentra un flujo vehicular alto debido a su conexión con la autopista A-8 y la proximidad de centros educativos y comerciales. En este sector, durante las horas punta, la rotonda ubicada junto al IES Miguel Herrero llega a soportar más de 2.200 vehículos por hora, lo que genera una significativa congestión. Las activaciones constantes de los semáforos para peatones en el puente de Torres son un factor crítico que reduce la capacidad vehicular en un 20%, generando embotellamientos regulares en esta zona.

Por otro lado, el análisis de la rotonda de La Habana Vieja, situada en la entrada norte de la ciudad, revela que este punto también soporta un elevado volumen de tráfico, con más de 2.000 vehículos por hora en hora punta. En este sector, la falta de aprovechamiento de los carriles interiores y la falta de segregación en los giros agravan la congestión. La reordenación de esta rotonda es fundamental para aumentar su capacidad.

Propuestas de mejora para cada zona

Entre las medidas sugeridas para mejorar la circulación en el sector de la Avenida Julio Hauzeur y el puente de Torres, se destaca la modificación de los ciclos semafóricos, aumentando en 20 segundos el tiempo de verde para los vehículos y activando una fase de ámbar intermitente para facilitar el avance cuando no haya peatones. Asimismo, se propone la reordenación de la avenida, incluyendo la creación de carriles adicionales en puntos estratégicos como Julio Hauzeur, Avda. Oviedo y el enlace de Ganzo.

Para la rotonda de La Habana Vieja, el estudio recomienda una reestructuración completa que permita aprovechar al máximo su capacidad actual. La creación de carriles segregados para giros específicos permitirá mejorar el flujo de tráfico en esta entrada norte, aliviando las colas que se generan y evitando la saturación en la zona.

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Innovadora metodología de recolección de datos

El diagnóstico de ambas zonas se ha llevado a cabo mediante un método avanzado de recopilación de datos, que incluye mediciones manuales, sistemas automáticos y el uso de drones y cámaras en puntos clave. Estas tecnologías permitieron observar y capturar el comportamiento del tráfico en cada sector desde una perspectiva aérea, obteniendo una visión detallada de los flujos y embotellamientos vehiculares específicos en la entrada oeste (Julio Hauzeur y puente de Torres) y en la entrada norte (La Habana Vieja).

Implementación y proyecciones

Jezabel Tazón confirmó que algunas de las medidas propuestas, como la regulación semafórica y el repintado de glorietas, se ejecutarán de inmediato en ambas áreas. En cuanto a las acciones que requieren obras de mayor envergadura, el equipo de gobierno ha iniciado los trámites para la redacción del proyecto técnico y la licitación. Estas intervenciones tienen como objetivo aliviar los puntos críticos de tráfico en las entradas oeste y norte de la ciudad, contribuyendo a una movilidad más eficiente y preparándose para las futuras obras de soterramiento del ferrocarril en Torrelavega.